"Pude hacerme adicta": así fue cuando Salma Hayek evitó sucumbir al botox
La actriz mexicana cuenta su experiencia con el botox y revela si lo ha usado (o no).
Pasada cierta edad, los rostros de muchas estrellas de Hollywood, hombres y mujeres por igual, son más obra de sus cirujanos plásticos que de la herencia genética que les legaron sus padres. Esa obsesión malsana de la meca del cine por permanecer siempre joven ha llevado a celebridades como Nicole Kidman o Courteney Cox a reconocer que perdieron el norte cegadas por los supuestos milagros del bótox antes de darse cuenta de que apenas podían mover los músculos de la cara.
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¿Salma Hayek ha usado bótox?
Sin embargo, hay una actriz que no se ha visto en esa situación: la mexicana Salma Hayek, quien forma parte del reducido grupo de artistas —en el que también militan Rachel Weisz y Kate Winslet— que se opone radicalmente a las infiltraciones y demás inyecciones.
Pero nadar contracorriente no siempre resulta sencillo, así que la intérprete de ‘Frida Kahlo‘ ha desarrollado una especie de mantra que se repite cuando su fuerza de voluntad comienza a flaquear.
"Cuando empiezas a fantasear y pensar: ‘A lo mejor debería ponerme un poco de esa cosa, el bótox, de lo que tan en contra estoy…’, pero entonces me digo: ‘Espera un momento. A lo mejor deberías dormir un poco más y hacer ejercicio y ser más sana y puede que eso tuviera el mismo efecto que un par de inyecciones de bótox‘".
Así explicó la guapa mexicana a la publicación Rhapsody antes de especificar —vocalizando únicamente las palabras— cuáles serían los primeros ‘vicios’ que debería abandonar: el alcohol y el tabaco. "Eso es a lo que me aferro. Siempre puedo hacer un esfuerzo por ser más saludable".
La estoicidad con la que Salma afronta el cumplir años,derrochando gracia y elegancia, tiene mucho que ver con el hecho de que jamás se había sentido tan demandada y cotizada en la industria cinematográfica, una situación que desafía el cliché de que las mujeres se vuelven invisibles para los directos a partir de cierta edad.
Salma Hayek habla sobre su experiencia sobre casi usar botox
En realidad, la actriz mexicana quería experimentar lo que implicaría ponerse infiltraciones en labios y pómulos e inyecciones de bótox como las que usaría a menudo su personaje, una alta ejecutiva de la industria cosmética.
«Estaba muy emocionada porque nunca había hecho nada parecido. Quería ver qué sucedía», confesó en declaraciones al portal Entertainment Tonight.
Finalmente su siguiente proyecto cinematográfico, para el que necesitaba mostrarse devastada ante la cámara sin maquillaje ni peluquería, le impidió dar ese paso porque no podía quedarle ningún resto de las infiltraciones y tuvo que conformarse con una peluca y unos dientes postizos.
"Puede que fuera lo mejor, puede que me hubiera vuelto adicta o algo por estilo".