Chris Evans: Joven, guapo, brillante actor y... soltero

Chris Evans: Joven

¿Qué más se le puede pedir a la nueva super estrella del cine, el protagonista de Captain America: The first avenger?

El joven actor, proveniente de un suburbio de Boston, ha enfrentado el reto más grande de su carrera: asumir uno de los personajes más icónicos del siglo XX, el capitán América, en su nueva versión cinematográfica. Y Chris Evans lo ha logrado, pues ha capturado a las audiencias del mundo entero.

Hijo de un dentista y de la directora artística de un teatro para la juventud en Sudbury, un barrio de clase media de la capital de Massachusetts, Chris ha hecho todo lo posible por no convertirse en la celebridad que todo el mundo piensa que debería ser. Pero ahora que ha dado el salto y tiene una película de más de 100 millones de dólares sobre sus hombros, ha tenido que aceptar que es la nueva superestrella del cine.

El casting de esta película fue un proceso largo y tormentoso. Explícanos qué fue lo que pasó.
Bueno, al principio hubo dudas de contratarme para hacer el personaje del capitán América. Luego me llamaron para hacer audiciones y acepté. Pero luego pensé que el compromiso de interpretar a ese personaje implicaba hacer cambios drásticos en mi estilo de vida, cambios que, francamente, no estaba seguro de querer hacer. Por eso tomé la decisión de decir “no, gracias”, y abandonar la posibilidad de protagonizar la película. Luego de un tiempo, me reuní con los creadores y ellos me explicaron lo que tenía que hacer. Yo pensé: “Si fuera tan solo una película sería maravilloso, pero 10 años de compromiso son demasiados”. Meditando sobre lo mismo, me dije: “Bueno, Chris, quizás este sea el momento de enfrentar tus miedos”. Y acepté, porque tenía que enfrentar todos mis temores.

¿De qué hablas cuando te refieres a cambios en tu estilo de vida?
Entre ellos, no poder ir al gimnasio, al supermercado o a caminar por la calle sin llamar la atención de una forma que a veces no puedes controlar. Mi vida hasta este momento ha sido ambigua: he podido permanecer anónimo durante un tiempo o reconocible en otro, y ya sé la diferencia. Para mí era importante hacer mi trabajo y no sentirme agobiado por el mismo. No me importa cuando un niño de 12 años se me acerca y lo hago feliz, pero cuando estás en momentos difíciles, cuando tu mamá está enferma o cuando me case y tenga hijos, quisiera tener privacidad.

¿Entonces te gustaría volver a tus días de semianonimato?
No tengo esa capacidad, ya el trabajo está hecho, y la verdad espero tener éxito, porque tengo muchos otros proyectos que hacer en la vida y este me va ayudar.

Explícanos cómo se ha visto afectado tu trabajo como actor.
Bueno, antes las películas las hacíamos una a la vez. Te contrataban para hacer una película, la filmabas y luego te dedicabas a ver cuál sería tu próximo movimiento. Ahora es diferente, pues tu tiempo está completamente establecido por la cantidad de compromisos que tienes, y si quieres hacer una película que te atrae, esta tiene que adaptarse a tu complicado horario o puedes correr el riesgo de que elijan a otra persona que se adapte mejor a las necesidades de la misma. Es como si estuvieras sin control, lo cual es un poco aterrador cuando se presentan planes en tu vida personal.

Superceloso de su intimidad Sus respuestas muestran una gran molestia cuando tiene que compartir detalles de su vida personal. Muy poco se sabe de este joven que acaba de cumplir los 30 años. Lo único es que Chris es muy apegado a su familia. Sus mejores amigas son sus hermanas, y cuando su hermano Scott (tres años menor), quien también es actor, reconoció ante los medios que era gay, Chris le brindó todo su apoyo.

Generalmente se le ve solo en estrenos y apariciones públicas. Tuvo una relación sentimental larga con la actriz Jessica Biel, quien lo dejó para salir con Justin Timberlake, hace más de cinco años. Ultimamente se le ha visto con Ashley Greene, la actriz de las películas Twilight, aunque también salía al mismo tiempo con Dianna Agron, de Glee. Nada serio. Tampoco sus personajes han sido serios. Evans sabe que su fuerte es la comedia. Comenzó su carrera con la película Not Another Teen Movie y luego consiguió roles interesantes en The Perfect Score y en el thriller Cellular, hasta que la fama llamó a su puerta con la nueva versión de Fantastic Four.

En esta película de superhéroes de la casa Marvel, Evans se robó la atención con su papel de Johnny, la antorcha humana. Durante el lanzamiento de esta y de la segunda parte, todos hablaban del actor simpático que no solo sabía bromear en escena, sino también actuar de forma convincente. Sin embargo, otro par de fracasos siguieron en su carrera. Primero con Scarlet Johansson (su antigua compañera de The Perfect Score), en la película The Nanny Diaries, que pasó sin pena ni gloria, y después en Scott Pilgrim vs. the World, una comedia juvenil que tampoco tuvo la acpetación que se esperaba. Los ejecutivos de la empresa Marvel (que tiene los derechos de muchas de las grandes historias de superhéroes a nivel mundial) reconocieron el talento y carisma de este actor, e incesamente lo llamaban para que se pusiera el traje con la bandera azul, blanca y roja, que representa los ideales americanos en el resto del mundo.

¿Veías películas de superhéroes cuando eras pequeño? ¿Cómo son tus recuerdos de los mismos?
Si te soy sincero, muchos de los recuerdos de mi infancia se relacionan con ser el niñero de mis hermanas más pequeñas y con ver My Little Pony, porque era eso lo que las calmaba. No era el niño emocionado con los superhéroes, pues era el osito guardián.

Dicen que no querías un doble para las escenas donde sales como un jovencito, ¿qué hay de cierto en eso?
No sé exactamente lo que oíste, pero te puedo decir la verdad. Lo cierto es que, hasta que tuve 17 años y decidí hacer ejercicios de entrenamiento seriamente, no lucía muy diferente del personaje en su primera parte (el capitán América pasa de ser pequeño y no bien nutrido a convertirse en la visión de un superhéroe con grandes músculos). La idea original era que iban a poner mi cabeza en el cuerpo de otra persona. Pero hablé con Joe Johnston, el director, quien tiene un Oscar por los efectos especiales de Raiders of the Lost Ark, y le dije: “No quiero parecer pretencioso durante mi primera semana de trabajo, pero me gustaría explorar una posibilidad diferente. No quiero compartir mi trabajo con otro actor”. Por suerte, aunque era más fácil poner mi cabeza en otra persona, no se veía tan bien como cuando cambiaron digitalmente mi cuerpo y lo usaron en diferentes escenas.

¿Cómo sientes que te ves con apenas 41 kilos (90 libras) de peso?
Irreconocible. Te provoca un shock cuando recuerdas la escena porque la hiciste, pero no te puedes reconocer. Cómo cambian las líneas de la cara, la posición del cuerpo, la expresión de los ojos... Los que trabajaron en ese proceso son unos artistas.En la película The Avengers vuelves a ponerte el traje de spandex con la bandera americana.

¿Qué sentiste cuando inmediatamente después de terminar una, ya estabas haciendo otra película con el mismo personaje?
No pudo haberse coordinado mejor, ya que en diciembre terminamos Captain America: The First Avenger e inmediatamente después comenzamos a filmar la nueva película, ahí mismo donde dejamos el final de la primera. De inmediato fuimos al trabajo otra vez, sin haber descansado, pero todo estuvo bien.

¿Cómo es tu vida fuera de capitán América? ¿Qué otras cosas haces además de este proyecto?
Me siento muy feliz de anunciar que también estoy haciendo otras cosas además de la película. Acabo de hacer dos que se van a estrenar este otoño, una que se llama Puncture, un drama donde interpreto a un abogado adicto a los fármacos que lleva a las mismas compañías que producen estos productos a la corte, y la otra se llama What?s your number? Es una comedia romántica muy divertida con la maravillosa y estupenda compañera de trabajo que es Anna Faris.Has mencionado lo negativo que implica tu trabajo.

¿Qué es lo positivo?
Mira, es fácil hablar de lo negativo porque es lo que molesta, pero debo admitir las maravillosas posibilidades que te abre el negocio del espectáculo en el que estoy. Mi vida podría ser mucho más complicada y difícil. Podría estar cocinando unas hamburguesas, y no lo estoy. Tengo la suerte de cobrar por lo que me gusta hacer, y por eso no he tenido que “trabajar” un solo día de mi vida. Además, tengo que reconocer que las películas que había hecho hasta ahora no habían sido tan interesantes, así que de ahora en adelante creo que eso va a cambiar.

Finalmente, ¿qué consejo les darías a todos los nerds que ahora te ven como su superhéroe?
Bueno, yo crecí rodeado de los chicos que no eran los más populares de la escuela. Pero lo que sí te puedo decir es que probablemente éramos los más inteligentes y brillantes de todos. Así que podría aconsejarles que solo sean ellos mismos, porque el hecho de ser nerd te da muchas ventajas.

Relacionado