Sus planes de boda con Brad Falchuk podrían ser los causantes de que la actriz se vea mejor que nunca
Teniendo en cuenta que su exmarido Chris Martin y sus hijos Apple y Moses le apoyan incondicionalmente de cara a tan importante decisión, no debería resultar en absoluto sorprendente que, una vez asegurado el visto bueno de los suyos, la actriz Gwyneth Paltrow irradia estos días una felicidad contagiosa al tiempo que se dispone a sumergirse de lleno en los preparativos de su esperada boda con el guionista y productor Brad Falchuk, junto al que anunció su compromiso matrimonial hace escasas semanas.
"¡Estoy emocionada por todo! ¡Nunca he tenido una boda! Así que a pesar de tener ya 45 años, siento que he regresado a los 21", bromeó la artista en conversación con la revista People para, a continuación, dejar patente que le queda mucho trabajo por delante si de verdad quiere disfrutar de un enlace digno de los cuentos de princesas.
“La verdad es que todavía no hemos empezado a planear ninguno de los aspectos principales, pero es divertido poder compartir tu ilusión con tus amigas y hablar con ellas sobre vestidos y cosas así. No paran de enseñarme fotos y es muy adorable por su parte que estén tan entusiasmadas como yo”, ha aseverado.
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Más allá del carácter especial del momento y de la originalidad de las propuestas que vaya a plasmar en la ceremonia o en el banquete, lo cierto es que la propia Gwyneth afirmó esta semana que no se veía a sí misma protagonizando una boda multitudinaria y que, en su lugar, optaría por satisfacer el deseo de su prometido de contar con un enlace discreto y familiar.
“Creo que soy demasiado mayor para tener una boda masiva y un vestido demasiado ostentoso, lo mejor será apostar por la sencillez, que es lo que le gusta a él”, manifestaba.
Por otro lado, sería interesante conocer si el líder de Coldplay jugará un papel significativo en la ceremonia dada la relación casi fraternal que le une a la mujer con la que compartió algo más de una década de convivencia, como ella misma argumentaba hace unos días al hablar sobre la estabilidad que reina en su vida familiar a pesar de ser una pareja divorciada.
“En realidad ahora es como mi hermano, somos muy familiares”, aseguró acerca del vínculo que mantiene actualmente con el padre de sus dos hijos. “Es muy agradable, es genial... El divorcio es terrible, fue muy doloroso y duro. Queríamos que fuera lo menos doloroso posible para nuestros hijos, que se vieran lo menos afectados posible”, explicó a su paso por el late night de Stephen Colbert.
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