En contra de lo que pudo parecer en un primer momento, la carrera de Jordyn Woods está lejos de haberse acabado ahora que el clan Kardashian ha roto cualquier relación de negocios con ella como castigo por haber besado al jugador de baloncesto Tristan Thompson mientras este aún mantenía una relación sentimental con Khloé, madre de su hija True.
La joven, que hasta hace poco era además la mejor amiga y compañera de casa de Kylie Jenner, puso rumbo a Londres para promocionar el lanzamiento de su colaboración con la marca de pestañas postizas Eylure, que esta misma semana se puso a la venta en una famosa cadena de droguerías del país.
Parece que el cambio de aires le sentó muy bien a Jordyn, ya que ya retomó su actividad en la esfera virtual con la misma frecuencia que lo hacía antes de que su vida personal y profesional se vieran afectadas por el mayor escándalo en el mundo del entretenimiento en Estados Unidos en lo que va de año.
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“Me alegro de volver. Buenos días, Londres. Espero que no te importe que vaya a compartir muchas fotos esta semana”, advertía al poco de aterrizar este mismo lunes en el aeropuerto de Heathrow acompañada de su madre, que también ejerce de mánager para ella.
Esa misma noche, Jordyn Woods en Londres acudió a cenar al popular restaurante Sushi Samba, donde no trató de pasar en absoluto desapercibida: además de posar para varios selfies con sus fans, también se dejó fotografiar con una calma absoluta por los paparazzi a la salida del establecimiento, quizá con la esperanza de que las fotos llegaran habitualmente al otro lado del Atlántico y sus antiguos amigos pudieran comprobar que no le va nada mal por su cuenta.
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“Celebrando el lanzamiento de mis pestañas mañana. No puedo creer que haya pasado ya un año desde que empezamos a crearlas”, escribió en otro post en la que posa ataviada con un favorecedor vestido dorado.
