La actriz llegó a un evento en China tomada de la mano de su nuevo amor, Ned Abel Smith
A Kate Winslet le sonríe de nuevo el amor, y su historia parece haber estado ya escrita.
Hace poco más de un mes, alrededor de las cuatro de la madrugada, un rayo cayó sobre un complejo de la isla de Necker, -donde la actriz se encontraba, propiedad de Richard Branson- y provocó un gran incendio. Al ser una construcción de madera, el fuego se propagó rápidamente y Kate fue una de las personas que ayudó a evacuar a los huéspedes, al igual que el hijo de Richard Branson, Sam, de 22 años. Ahí también estaba Ned Abel Smith, sobrino del magnate británico.
Tras la tragedia, Branson envió un email a CNN para dar las gracias públicamente a la estrella de “The Reader” por haber ayudado a evacuar a su madre, Eve Branson, de 90 años, y ponerla a salvo de las llamas.
Y así, tras muchas especulaciones de un posible romance entre Kate y Ned, la pasada semana asistieron juntos al funeral en memoria del padre de Richard Branson, Ted Branson. Ese hecho avivó los rumores.
Pero fue apenas hace un par de días cuando todo se confirmó. La actriz viajó a Shanghai como embajadora de la firma de relojes Longines, en donde estuvo acompañada de Ned. Los dos llegaron juntos y tomados de la mano a una fiesta organizada por esta marca. Sin duda, Winslet se veía radiante y muy feliz.
Hasta hace poco Smith, de 33 años, estaba casado con Eliza Cowdray, de 23 años, la hija de un rico vizconde británico. La pareja se casó en 2009 en una ceremonia a la que acudió la princesa Beatriz, pero se separaron recientemente.
Winslet tampoco permaneció sola mucho tiempo. La actriz, de 36 años, se separó de Sam Mendes el pasado mes de marzo y pronto recuperó la sonrisa con el modelo Louis Dowler, con quien mantuvo una relación intermitente hasta que conoció al que hoy es su nuevo amor. Por cierto, durante su estancia en Necker, Kate estaba con Louis, pero parece que definitivamente su amor no fue tan fuerte, pues además de las llamas que hubo ahí, también se avivaron las llamas de este nuevo amor.
