Asegura que este color no le favorece a su imagen
La guapa actriz piensa que el color rojo no le hace justicia por su claro color de pelo. De hecho, cada vez que decide ponerse un vestido de este color no se siente cómoda por lo mal que le queda.
“Nunca vestiré de rojo sobre la alfombra roja. Creo que las rubias nunca estamos guapas cuando llevamos este color. Al contrario, creo que a las morenas que tienen pieles más oscuras les queda fenomenal. Pero por alguna razón, me parece que voy mal cuando visto de rojo”, explicó Naomi a PEOPLE.
Sin embargo, la intérprete lució en un evento reciente un vestido rojo diseñado por Zac Posen, pero explica que lo hizo porque el vestido tenía muchos más colores.
“Tenía un estampado muy cargado, con muchos colores, no se puede decir que fuera un rojo chillón. En los Globos de Oro llevé un color borgoña o ciruela. Eso no era rojo. Si le pones un tono azul al vestido, me puedo atrever a llevarlo pero el naranja es otro color que no se ajusta al color de mi piel”, añadió la estrella.
Estas declaraciones de la intérprete encajan con su preocupación por su imagen y lo que esta supone para su trabajo. Recientemente, Naomi reveló sus reticencias hacia la cirugía plástica ya que teme que ello pueda limitar los papeles a los que podría acceder.
“No puedo asegurar que nunca lo haga y, por supuesto, no juzgo a la gente que lo hace. Pero la mayoría de los personajes que interpreto pasan por momentos emocionales muy complicados por lo que necesito jugar con la expresividad facial”, explicó la actriz.
“Si mi cara está paralizada, ¿cómo podría interpretar bien el papel? La prueba es que todas las mujeres que no se han hecho nada en la cara todavía son capaces de interpretar papeles estupendos. Algunas de las que se han retocado, se han hecho un estropicio y ahora tiene una pinta rarísima. De cualquier forma, lo importante para mí es interpretar a mujeres con grandes vidas y cuanto más larga es tu vida, más profundas son tus arrugas”, sentenció.
