Después de leer esto, querrás probar más de este icónico platillo mexicano acompañado de una buena copa de vino. Te decimos cómo acompañarlos mejor
Podría decirse que mexicano a quien no le gusten los tacos no es mexicano, ya que, sin duda, son de los platillos más icónicos de la gastronomía de México y son el mayor representante a nivel mundial. Hablar de tacos es hablar de México. Hace más de 1,500 años fueron los Olmecas los que inventaron la tortilla, la cual es un elemento esencial para degustar un taco, y se cuenta que fue el emperador Moctezuma quien comenzó a usar la tortilla como cuchara, y es así como surge el taco. Son los tacos el eterno compañero del mexicano en su gastronomía y así como el clima cambia dependiendo de la región de México donde te encuentres, sucede lo mismo con los tacos de norte a sur o de este a oeste? La variedad de tacos es impresionante. Valentina Ortiz Monasterio, embajadora de la gastronomía mexicana y asidua promotora del vino nacional, nos ayuda a realizar un mapa gastronómico de los tacos en México y nos da opciones de cómo podemos maridarlos con vino. ¡Sí, así como lo lees!, aunque esta idea te resulte ajena y muchos tengamos la percepción errónea de que el vino sólo va de la mano con comidas sofisticadas, el vino es una bebida bastante amigable con todo tipo de alimentos, en especial con la diversidad gastronómica que presentan los tacos. Así que para que vivas nuevas sorpresas culinarias, aquí las recomendaciones y el mapeo del taco en México: Noroeste. Esta zona del país se caracteriza por proveer de tacos de pescado y mariscos, que suelen estar acompañados por tortilla de harina gruesa, col y queso manchego gratinado. Tacos estilo Baja están compuestos por pescado rebozado, que se les acompaña con mayonesa y un toque de limón y la salsa que mejor le va es la mexicana. Se caracterizan por ser un platillo fresco y alto en grasa debido al pescado rebosado. En este caso, el vino que mejor le acomoda es el vino blanco del tipo Chenin Blanc, el cual respetará la frescura del platillo, las notas cítricas aportadas por la mayonesa y el limón, que logran un balance perfecto y guiarán bien en nuestro paladar al pescado rebozado.
Norte. La
carne
es el elemento esencial para todos los que viven en el norte del país. En las taquerías de esta región podemos encontrar en su mayoría cortes de carne como la arrachera, las fajitas, las agujas. Al igual que en el noroeste, se gusta servir los tacos con tortilla de harina acompañados por frijoles charros. Taco de asada es el clásico de los norteños, y se sirve la carne de res asada, como el bistec, se acompaña con guacamole y es envuelto en una tortilla de harina grande. A esta delicia le va bien un vino tinto joven debido a que los elementos que lo componen no son de sabor intenso.
Occidente. Esta región se caracteriza por el uso de la carne de borrego para los tacos, como la barbacoa y la famosa birria. El taco de barbacoa es un platillo que por su carne de borrego, más el cilantro, la cebolla, la salsa y el maravilloso sabor de la tortilla caliente, combina perfecto con un vino tinto Cabernet Sauvignon o Merlot; esto debido a que el sabor de la carne es ligero, lo que permite resaltar sus componentes sin que pierda el sabor del vino.
Centro. Es la cuna de los tacos urbanos, y en cada una de las esquinas del centro del país puedes encontrar una taquería, ya sea de tacos al pastor, puestos de tacos de guisado o los tradicionales tacos de canasta, los cuales recorren las calles de la ciudad en tradicionales bicicletas con vitrolas llenas de salsa verde. El taco de pastor es el favorito de nacionales y extranjeros. Es el icónico en la Ciudad de México, es bastante condimentado y colorido por el axiote con el cual se marina la carne. En este caso le va bien un vino tinto aromático, ya que reducirá lo graso del taco, el sabor particular de carne ahumada y la acidez de este vino son el mejor equipo.
Sur. El sur de México se caracteriza por lo exótica que puede llegar a ser su gastronomía, en donde no es de sorprendernos encontrar tacos con insectos, como los chapulines, escamoles, gusanos de maguey, entre otros insectos característicos de la gastronomía prehispánica y orgullo nacional. Tacos de tasajo con chapulines. Icónicos del estado de Oaxaca, este platillo se compone por carne de res cortada finamente y es curada en sal; luego se colocan chapulines que son tostados en comal sobre una tortilla de maíz hecha a mano, acompañados por un guacamole, lo que hace que se equilibre el platillo. El mejor vino para acompañar este peculiar platillo es un Tempranillo, ya que tanto la carne como los chapulines poseen un sabor fuerte, generando así el equilibrio perfecto.
Península. Es, sin duda, una de las cocinas más importantes del país y el mundo, posee influencias españolas, del Caribe y Medio Oriente. Sus tacos más representativos, sin lugar a dudas, son los de cochinita pibil. Taco de cochinita pibil es el icónico del estado de Yucatán, cuya característica al paladar es la acidez que le da la naranja y el achiote, condimento esencial de toda cochinita, que aporta color y sabor al platillo, y se sirve con tortilla maíz. Su mejor compañero será un vino tinto con sabores intensos. ¿Lista para disfrutar tus tacos con una buena copa de vino?
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