Existen creencias que distorsionan la visión de este padecimiento. Muchas de ellas son piedras en el camino y hay que arrojarlas lejos para no tropezar.

Su diagnóstico es una condena de muerte
Contrario a lo que muchas creen, la posibilidad de sobrevivir es muy alta si se detecta a tiempo y se trata de manera adecuada.

Los desodorantes causan cáncer
Hay quienes dicen que los desodorantes ‘tapan’ los conductos y se acumulan agentes tóxicos. No es verdad. Lo cierto es que entre menos químicos (incluidos en tintes y cremas) apliquemos, mejor. Una opción segura son los productos orgánicos.

Es contagioso
Nada más alejado de la realidad. El cáncer de ninguna manera es una enfermedad que se pueda transmitir por contacto.

Las mujeres con senos grandes lo padecen más
Esto es un mito arraigado, pero ya se ha demostrado que es una premisa sin ningún fundamento.

Los sostenes apretados pueden provocarlo
Se cree que la presión de las varillas hace que las toxinas se acumulen y que esto lo provoca. No es verdad. Lo mismo aplica para los golpes.

Es una enfermedad heredada
No necesariamente. Se ha comprobado que del 90 al 95% de los casos no son de origen hereditario.

Los aparatos electrónicos lo detonan
No se tiene la certeza de ello. Si bien es cierto que los campos electromagnéticos de aparatos como teléfonos inteligentes, computadoras y tabletas emiten niveles de radiación que, según investigaciones realizadas por el National Institute of Environmental Health Sciences de Estados Unidos, podrían generar tumores, sobre todo en el cerebro, no hay evidencia de que los causen en las mamas.

Tip
Si deseas información detallada sobre el cáncer, las causas y prevención, los factores de riesgo y la radiación, consulta www.cancer.gov en español.