Froilán, hijo de la infanta Elena, permanece hospitalizado tras haberse disparado en el pie; teme por el enojo de su abuelo
Felipe Juan Froilán, el nieto mayor de los reyes de España, hijo de la infanta Elena y Jaime de Marichalar , se encuentra ingresado en la clínica Quirón de Madrid, donde está siendo atendido de un disparo en el pie. El niño, de 13 años, se encontraba con su padre realizando ejercicios de tiro en el patio de la finca familiar de Garrejo en Garray, Soria, cuando en un descuido se le disparó la escopeta, un arma de pequeño calibre, según informaron fuentes de la Casa del Rey.
La infanta y la reina Sofía aclararon a los periodistas que el niño se recupera muy bien.
“Los médicos nos han tranquilizado. Está bien, jugando. Ya se sabe que los niños se recuperan rápido”, aseguró la infanta .
A la pregunta de cómo había sucedido el accidente, doña Elena se limitó a decir: “No lo sé, estaba con su padre”.
El accidente ocurrió este lunes alrededor de las cinco de la tarde. El niño llevaba la escopeta en la mano apuntando hacia abajo cuando en un momento dado se produjo un disparo, que alcanzó a bocajarro el pie derecho de Felipe. Al estar tan cerca del pie el cañón del arma, todos los perdigones contenidos en el cartucho salieron proyectados apelotonados y atravesaron de lado a lado la extremidad. El impacto se produjo a la altura del segundo metatarsiano, causando también pérdida de tejido blando. No obstante los médicos aseguran que el menor no va a sufrir secuelas, según fuentes de la Casa del Rey.
Tras el accidente, la Casa del Rey emitió un comunicado para informar del accidente del niño. “Estando en el patio de la casa, acompañado de su padre, se le disparó una escopeta de pequeño calibre (calibre 36), causándole una herida en el pie derecho”, decía la nota.
El incidente trae a la memoria la tragedia ocurrida en Estoril, Portugal, el Jueves Santo de 1956, cuando el infante Alfonso de Borbón, hermano pequeño del rey, murió de un disparo en la frente a los 14 años. El accidente se produjo al dispararse una pistola que estaba manipulando don Juan Carlos, que entonces tenía 18 años. El arma era un regalo que el general Franco había hecho a su padre.
Preocupado por reacción de su abuelo, el rey Juan Carlos
El nieto mayor de los reyes de España llegó más preocupado que dolorido a la clínica Quirón, donde lo operaron tras su accidente con una escopeta de caza, según publica el periódico El Mundo.
“El abuelo se va a enfadar mucho”, dijo Froilán. La preocupación del menor por la reacción que haya podido tener su abuelo es comprensible dada la relación especial que une al pequeño con el monarca .
Froilán también quitó a su padre Jaime Marichalar cualquier responsabilidad en el accidente.
“Es mi culpa, mi padre nada tiene que ver”, manifestó el hijo de la infanta Elena a su llegada al hospital.
Y es que no es juego de niños. El accidente dio a conocer que el pequeño de 13 años hacía uso regular de armas desde los 8 años, cuando la edad legal para poder utilizar el tipo de armamento que el pequeño utilizaba son los 14 años.
Ajeno a todo este revuelo, Froilán sigue recuperándose en el hospital. Ayer recibía la visita de la reina Sofía y hoy fueron los príncipes de Asturias y sus hijas quienes han querido mostrar su apoyo y cariño al pequeño cazador.