Este miércoles, duques de Cambridge iniciaron una gira de dos días en Irlanda del Norte con el fin de promover los beneficios del deporte y la vida al aire libre para el desarrollo de los niños. Para llegar a Belfast, Kate Middleton eligió un abrigo rojo de manga larga y maxi botones, de Carolina Herrera, que previamente había usado durante su gira por Canadá en septiembre de 2016.
Algo que se ha destacado es que esta pieza también la ha usado la infanta Sofía , hija de los reyes de España , en su versión infantil en la celebración del día de la Hispanidad de ese mismo año.
En esta ocasión, Kate lo combinó con unos jeans, un jersey negro de manga larga y los botines de L.K Bennett de tacón ancho que estrenó hace unas semanas en su visita a dos escuelas. Como joyas, optó por unos discretos pendientes en forma de corazón resaltando en tono amarillos y diamantes pave, de Kiki McDonough. Más adelante, William y Kate mostraron sus propias habilidades durante un partido en el estadio Windsor Park de Belfast, hogar de la Asociación Irlandesa de Futbol, que realiza programas para alentar a las niñas a practicar el deporte y que apoya a los clubes que lidian con problemas de salud mental.
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PARA LA NOCHE
La duquesa de Cambridge realizó su tercer cambio de atuendo del día para asistir a una recepción en el icónico Empire Music Hall de Belfast, para la cual eligió un vestido envolvente y metálico, de Missoni, el cual combinó con sus ya clásicos tacones color nude, de Gianvito Rossi, y un clutch a tono, de Mulberry.
Como el vestido ya llama la atención por sí solo, Kate eligió discretas joyas como una delgada cadena de oro con un dije en forma de gota.
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