Dueña de una de las voces más distintivas del planeta, esta cantante nos dice cómo maneja su carrera en la industria musical
Tal vez porque muchos la conocieron gracias a los temas que prestó hace cinco años para la película La piel que habito, de Pedro Almodóvar , a Buika se le encasilló como una cantante de flamenco; pero con Vivir sin miedo, su última producción, deja claro que con su impresionante voz puede cantar el género que sea y, además, en el idioma que quiera.
Hace unos días conversamos con Buika antes de que subiera al escenario del Teatro Metropolitan en la Ciudad de México, y nos contó acerca de su última producción y de muchas otras cosas...
¿Cómo surgieron las ideas para Vivir sin miedo?
La composición es algo que siempre está, siempre escribes. La idea de los discos nació de las discográficas, no de los artistas. Yo no hago discos, no tengo nada que ver con eso, tengo 2.000 canciones archivadas. Estoy en constante evolución y proyección, pero luego vienen las casas disqueras y me dicen que haga un disco. Yo solo me dejo llevar, ¿por qué no? Pero no tenía idea de hacer un disco, nunca la he tenido, lo que hago son canciones y poner 12 juntas es complicado.
¿Qué piensas hacer con las otras canciones que tienes archivadas?
Si quieres que te diga la verdad, abriría una página de Internet y, a medida de que fuera terminando canciones, las iría poniendo ahí. No entiendo muy bien lo de los discos, el formato de CD no suena bien. Dejas tu alma en una grabación muy pura y luego viene el mastering y empiezan a decir que eso no sonará así en la radio, pero ¿eso qué tiene que ver con la pureza de una canción?
¿Entonces tu futuro está en Internet?
No suena nada mal, ahí tú haces tu mundo, no me molesta que las discográficas entren a formar parte de ese mundo, pero que lo hagan como nacieron, como lugares de ilusión que servían para promocionar la música que hacíamos todos, no solo unos cuantos. Hoy día son detonadores de cierto tipo de sonido; eso ya está muy anticuado.
¿Qué significa el título de tu disco, Vivir sin miedo?
A la hora de entrar al estudio se acabó el miedo de que la canción dure más de tres minutos o de que cante en inglés. Quien no quiera escuchar el disco que no lo escuche; la radio que no lo quiera poner que no lo ponga, pero ponerle una limitación intelectual y espiritual a la música en función de la industrialización es una barbaridad. Es absurdo y ya no tenemos que seguir haciéndolo. Si me quieren echar de la discográfica, que me echen, pero la gente siempre estará ahí esperando a que el artista vuelva a hacer su trabajo.
Eres famosa por no repetir la misma lista de canciones en dos conciertos. ¿Qué decide lo que tocarás cada noche?
?La tribu? (que es como ella llama a los suyos) es la verdadera directora de orquesta, es la que decide que tú vas a ser cantante, que vas a seguir en los escenarios. No son las disqueras, los promotores o los mánagers, es la tribu la que decide por encima de cualquier eminencia o presidente; la tribu es soberana y eso es lo que más me apasiona de la música, que es nuestra propiedad de verdad. La música le pertenece al pueblo y tiene que volver al pueblo, no pertenece a las instituciones ni a los reyes, le pertenece al pueblo, y eso hace que para mí la música sea un milagro y sea magia.
Hace unos años declaraste que estabas por casarte contigo misma. ¿A qué te referías?
(Risas) Lo dije porque me gusta ponerlos a ustedes en ?candela? (risas). Simplemente se me ocurrió que antes de entregarle algo a alguien te lo tenías que entregar a ti misma. Si pretendes darle lealtad a otros y no te la das a ti no es válido, porque no vas a saber darle lealtad a otra persona si antes no pasa por ti. Ante todo, el humanismo, la generosidad, la lealtad parten de uno mismo. Si no te eres fiel no le vas a ser fiel a nadie.
¿A quiénes consideras tus maestros?
A mi madre, mi abuela, el arte y toda la historia de personas y artistas, porque para mí artistas somos todos los que hacemos de nuestra vida un arte, sin importar que seas panadero o músico. He aprendido mucho de los artistas que han tenido el valor de contar su verdad, no la que querían que los demás contaran o las que les hacía sentir como reyes, sino su propia verdad. Los que dicen: ?Yo mentí, yo robé, yo amé?.
Si ya no pudieras cantar, ¿qué harías?
A los artistas y a los soldados nos alimenta más el hambre que la comida, para nosotros las metas son los caminos. Todos los procesos son interesantes, hasta los que no nos gustan. Por eso digo que no reniegues de lo que no te gusta, más bien, asúmelo con pasión... Para seguir un camino es bueno que escuches a tus enemigos y no desconfíes de ellos, porque son capaces de decirte la verdad de lo que piensan de ti sin filtros; los amigos, no.
¿Cuál ha sido tu mayor logro?
Criar a un niño, conseguir que tenga fe en el mundo y en el ser humano; que viendo los noticieros consigas que tu hijo se dé cuenta de que este es un lugar bonito, sano e impresionante. Lo estoy consiguiendo y soy muy feliz por eso.
Con tu ritmo de trabajo, ¿cómo encuentras espacio para criar a tu hijo?
Siempre he pensado que no hay cosas imposibles. Necesitas tiempo. Si realmente lo quieres y lo necesitas, lo conseguirás. No creo en la culpa, creo en la responsabilidad. Me hago responsable de que algo no hice bien; pero culpa, no.