Tras seis meses de ausencia, la reaparición de Kate Middleton no descepcionó. La princesa lució radiante, sonriente y, como era de esperarse, con un look impecable, cuidado en todos sus detalles y lleno de simbolismo.
Aunque se especulaba su presencia en la celebración Trooping the Colour, a través de un emotivo comunicado compartido ayer en sus redes sociales, la princesa de Gales habría expresado su interés en acudir a tan importante evento, abriendo la posibilidad de verla de nuevo.
Trooping the Colour es uno de los más importantes festejos del Reino Unido. Aunque el cumpleaños oficial del rey Carlos III es el 14 de noviembre de 1948, por tradición, los monarcas ingleses aprovechan los cálidos días de junio para celebrar el que es considerado por muchos como el segundo cumpleaños del rey.
El evento consta de recorridos en carroza, un impresionante desfile militar y, para finalizar, la familia se reúne en el balcón del Palacio para saludar a las multitudes que acuden año con año a la celebración.
Kate Middleton y un look repleto de significados
Para su reaparición pública, Kate decidió lucir un vestido de largo midi, creación de la diseñadora Jenny Packham. A juego por contraste con el look de su pequeña hija Charlotte, quien lució un vestido azul marino con cuello marinero, el modelo que usó Kate era blanco con motivos azul oscuro.
La última vez que la futura reina de Inglaterra se mostró fue en un video, donde comunicaba que había sido diagnosticada con cáncer, que comenzaría un tratamiento de quimioterapia preventivo y que se alejaría de la vida pública.
En su reaparición, la nuera de la princesa Diana mostró su buen semblante, aunque notoriamente delgado. Como detalle de moda, la prenda lucía un lazo XL en el cuello, aportando un sofisticado elemento de tendencia.
Como detalle simbólico, Kate Middleton eligió los mismos colores que en 2011, cuando debutaba en este acto junto a los Windsor, mes y medio después de casarse con el príncipe Guillermo. Si esta reaparición se interpreta como un nuevo debut, este color tiene un importante mensaje.
Cumpliendo con el protocolo de elegancia inglés, Kate completó su look con un espectacular un tocado bicolor con una pluma minimalista, obra del experto en sombreros Philip Treacy. Un chongo recogido y un maquillaje sobrio que, aunque la hacía ver radiante, dejaba entrever algunos rastros de cansancio.
Si una imagen puede definir sencillez y elegancia en un atuendo, el look de Kate sería uno de los mejores ejemplos. Como complemento a su estilismo no podían faltan joyas significativas, en esta ocasión fueron unos aretes de perlas en forma de flor. Anteriormente, los Cavolfiore de Cassandra Goad los había usado en el bautizo del pequeño Louis (siendo un importante homenaje a sus pequeños, quienes son motivos de sus más sinceras sonrisas). El broche del Regimiento de la Guardia Irlandesa. Y, por supuesto, su majestuoso anillo de compromiso con zafiro azul.
All set for The King's Birthday Parade! pic.twitter.com/jbangtZvA3
— The Prince and Princess of Wales (@KensingtonRoyal) June 15, 2024
Todo en su estilismo destilaba elegancia y sofisticación como Kate acostumbra en todos los eventos y, especialmente, en este en el que era el centro de las miradas. Para el diseño de sus zapatos, usó uno de los modelos de calzado que se han vuelto parte de su sello de estilo: unos estilizados stilettos blancos.
