Más allá de aplicártelos en la piel en cada estación del año, los perfumes pueden convertirse en tu sello distintivo
Si bien es cierto que los días más fríos sugieren fragancias más cálidas y sensuales, con notas amaderadas, lo más importante es que con tu perfume puedas expresar tu personalidad o la imagen que quieres proyectar (divertida, moderna, romántica, sofisticada, misteriosa...). Recuerda que el olor tiene un gran poder evocador, con el que dejarás tu huella.
Decadence, de Marc Jacobs. Un frasco verde con tapa de oro y pitón encierra una sensual fragancia floral y amaderada.
Sì, eau de parfum Intense, de Giorgio Armani. Lujoso, floral y muy femenino, este perfume es un homenaje a la mujer audaz que gusta de los riesgos.
Baiser Volé eau de parfum fraîche, de Cartier. Ligera e impactante, envuelve la piel en la estela de un fresco lirio aéreo.
Chance eau Vive, de Chanel. Lo último en la línea de fragancias Chance, en su versión más energizante gracias al frescor que revelan sus notas cítricas.
J?adore Touche de Parfum Dior, de Christian Dior. Su base de aceite único y su innovador aplicador te permiten mezclarlo con otras fragancias J?adore para crear un aroma a tu medida.
Light Blue Sunset in Salina, de Dolce & Gabbana. Una fragancia floral fresca con el alma pura y alegre del Mediterráneo.
A la hora de elegir un aroma debes tener en cuenta que los perfumes tienen tres fases, por lo que no debes dejarte llevar por ese primer olor, que son las notas de salida: las más efímeras y solo duran unos 15 minutos. La segunda fase durará más o menos 40 minutos y después se revelará el aroma de base que permanecerá durante horas en tu piel. Para no equivocarte, pide una muestra y pruébalo un día entero. Así te asegurarás de que sí te gusta.
Clever, de Mary Kay. Una fragancia divertida, original y juvenil, con flor de almendro, margarita y malvavisco almizclado como ingredientes clave.
MYNY, de DKNY. Notas de frambuesa, gálbano, pimienta rosa, jazmín... capturan el espíritu moderno y apasionado de la ciudad neoyorquina.
Ilía, de Natura. Inspirado en la mujer latina, mezcla la delicadeza de las flores blancas con la alegría de las frutas y el misterio del pachulí.
Le Parfum eau de parfum, de Elie Saab. Como una oda a la luz, celebra el esplendor y el brillo de una femineidad radiante, sobre un tema floral y amaderado.
Modern Muse Le Rouge, de Estée Lauder. Con un seductor contraste, ricas rosas y frutas se enlazan para revelar el glamour y la fuerza de una musa moderna.
Eau Parfumée au thé vert, de Bulgari. La vitalidad del té se funde con pimienta y bergamota italiana en un dulce aroma sutil.
L?Eau d?Issey Absolue, de Issey Miyake. Un floral luminoso a base de miel y jazmín nocturno.
Neoncandy, de Tous. Sube la adrenalina con los colores de su frasco y con sus deliciosas notas cítricas y florales.
