Fiebre por las colaboraciones

Fiebre por las colaboraciones

Una de las más fuertes tendencias en el mundo de la moda es la alianza entre diversos diseñadores, marcas y celebs para crear originales colecciones


Hoy día, para ser rentable, el mercado del prêt-à-porter debe estar siempre en movimiento. La consumidora, acostumbrada a la permanente renovación que proponen tiendas internacionales como Zara o H&M, exige novedades todo el tiempo y las tradicionales dos colecciones anuales ya no son suficientes para mantener su interés a lo largo de todo el año. Por eso las marcas se ven obligadas a reavivar la atención del público con colecciones crucero, pre-fall, cápsulas y ediciones limitadas.

Dentro de esta gran cantidad de ofertas, en los últimos años un ?virus? se ha propagado con fuerza: las colaboraciones entre las marcas y los diseñadores. ¿A qué se debe esta ?explosión?? Por lo pronto, a la aceleración y proliferación de lo que se informa en las redes sociales. En consecuencia, para no perder actualidad, las marcas deben comunicar su permanencia por Facebook, Twitter o Instagram. Pero puesto que es difícil mantener la atención del público con una sola historia, deben crearse nuevas continuamente. Así, las colecciones cápsula dan a las firmas la ocasión de renovar la comunicación y aumentar las propuestas a sus clientas.

Con las colaboraciones, todos salen ganando. Para el creador es una oportunidad de dar a conocer su trabajo a un público más amplio y atraer a una nueva clientela. También es la ocasión de enfrentar técnicas que no conoce y descubrir un universo que no es el suyo. Por su parte, para una marca masiva, asociarse a un gran creador es una herramienta comercial y de marketing muy útil, que le dará una imagen más poderosa. Si la operación funciona, los beneficios son mutuos. Y, finalmente, también es ganador el público, al que se le permite adquirir un producto de un diseñador que normalmente le es inaccesible.


FOTOGALERÍA: LAS COLABORACIONES DE MODA MÁS FAMOSAS Y EXITOSAS


Alianzas estratégicas

Si las colaboraciones existen desde hace tiempo, el gran boom de la última década es obra de la cadena sueca H&M, que lanzó la tendencia a nivel masivo con su primera colaboración con Karl Lagerfeld en el 2004. Para Margareta van den Bosch, consejera creativa de la firma y gran instigadora de estas geniales operaciones, el objetivo entonces era ?crear una sorpresa?. ?¿Por qué no colaborar con un diseñador célebre a precios de H&M? El primer nombre que nos vino a la mente fue Karl Lagerfeld, modisto icónico conocido en el mundo entero. El se mostró entusiasmado, encantado de probar que la creación no es una cuestión de precio. Pero, sinceramente, quedamos estupefactos con la reacción del público?, dijo Margareta. En efecto, desde el día de su lanzamiento, multitudes de personas se abalanzaron a las tiendas H&M de todo el mundo. En un par de días la colección se había agotado. A partir de ese momento, H&M propone con igual éxito dos colaboraciones por año, que han incluido, entre otros, a Stella McCartney, Sonia Rykiel, Lanvin, Versace, Roberto Cavalli, Jimmy Choo, Martin Margiela, Isabel Marant y, en su última edición, Alexander Wang.

Estas ?complicidades? temporales tienen diversas variantes: una marca y un diseñador, una marca con otra, una marca y un artista o una marca y una celebridad. La primera figura, una marca y un diseñador, es la más habitual. La cadena Target también realiza regularmente colaboraciones con creadores reconocidos como Missoni, Jean Paul Gaultier, Proenza Schouler, Tara Jarmon y, más recientemente, Phillip Lim y Joseph Altuzarra, a las que el público siempre responde con entusiasmo. La cadena inglesa Topshop suele proponer colecciones cápsulas con creadores muy british, como Christopher Kane, Mary Katrantzou o J.W. Anderson. El multifacético diseñador Jeremy Scott es el autor de una línea de carteras para Longchamp, de relojes para Swatch, de zapatillas para Adidas y hasta de una colección con Miley Cyrus.

En el 2007, Gap propuso una línea de zapatos de Pierre Hardy de la maison Hermès. En el 2009, Uniqlo comenzó una colaboración con Jil Sander que duró tres años y en el 2010, una colección creada por el dúo Grazia Chiuri y Pierpaolo Piccioli, entonces directores artísticos de Valentino. El verano pasado, Banana Republic ofreció 25 piezas del superchic Roland Mouret. Y estos son apenas unos ejemplos...

Otras veces son dos marcas igualmente célebres que se unen en proyectos especiales como Levi?s o Dr. Martens con Liberty of London; Marimekko con Banana Republic; Public School con J.Crew, Paul & Joe con Aigle; Topshop con Adidas Originals?

Entre los años 1990 y 2000, las colaboraciones con artistas fueron muy solicitadas, como en el caso de Louis Vuitton, firma para la que trabajaron Stephen Sprouse y Richard Prince. Hermès no dudó en modernizar su colección de carrés con los diseños de Josef Albers y Daniel Buren. Más recientemente, en el 2013, Damien Hirst reinterpretó la calavera de Alexander McQueen en unos pañuelos para la marca.

En la actualidad estamos en el turno de las celebridades, quienes, cada vez con más frecuencia, juegan a ser diseñadoras para una marca. Es el caso de
Kate Moss para Topshop, Natalia Vodianova para Etam, Rita Ora para Adidas Originals, Sofia Coppola para Louis Vuitton, Inès de la Fressange para Uniqlo, Zooey Deschanel para Tommy Hilfiger, Cara Delevingne para Mulberry y muchas más. En este año 2015 se anuncian dos colaboraciones muy esperadas por las
fashionistas: las líneas de streetwear y sportwear de Beyoncé para Topshop y las sorpresas que pueda ofrecer Rihanna, nueva directora artística de Puma, encargada de modernizar las piezas clásicas de la marca y agregar otras de su propia creación

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En definitiva, la colaboración es una operación a menudo ganadora, una apuesta creativa con pocos riesgos debido a su carácter efímero y que propone piezas excepcionales. Es el marketing ofrecido por la creación y, solo por eso, tiene todas las virtudes.

Pharrell Williams, el rey de la colaboración
En música, se pierde la cuenta de sus dúos, intervenciones o proyectos con otros artistas como Daft Punk, Robin Thicke, Shakira, Miley Cyrus, Justin Timberlake o Alicia Keys. En cuanto a la moda,Williams no se queda atrás: Louis Vuitton (joyas y gafas), G-Star(ropa de fibras ecológicas), Moynat (carteras), Moncler (gafas de sol),Uniqlo (camisetas y sweats) y Adidas. Hoy, Pharrell Williams es una marca por sí mismo, garantizando una pizca de pop attitude a quien se asocia con él?

El mercado del calzado deportivo
Si hay un área en la moda que actúa como un imán para marcas y diseñadores es el calzado deportivo. Todos los creadores quieren hacer modelos para Nike, Adidas o Puma. Por ese motivo, desde hace años esas grandes marcas, además de ofrecer colecciones cápsulas con grandes nombres del deporte, acuden también a los de la moda. La asociación entre Converse y Missoni, desde el 2010, ha probado ser un éxito. Nike lanzó varias colecciones cápsula, entre ellas con Ricardo Tisci, Hiroshi Fujiwara, y A.P.C.; Vans se asoció con Kenzo y Disney; Adidas con Jeremy Scott, Yohji Yamamoto, Pharrell Williams y Mary Katrantzou; Bata se unió con Comme des Garçons para una exclusivísima colección cápsula y Puma probó su gusto por el riesgo con Alexander McQueen, Hussein Chalayan y Rihanna.

FOTOGALERÍA: LAS COLABORACIONES DE MODA MÁS FAMOSAS Y EXITOSAS

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