¿Te mudas de la casa de tus padres? Tips financieros para ayudarte a vivir solo

¿Te mudas de la casa de tus padres? Tips financieros para ayudarte a vivir solo

Llegó el momento de independizarte. Quieres vivir bajo tus propias reglas, manejar tus horarios y recibir a tus amigos sin darle cuentas a nadie. Pero, ¿ya te preguntaste si podrás pagar tus gastos?


Antes de salir de casa de tus padres (no después) debes preguntarte si estás consciente de la responsabilidad financiera que implica vivir solo (o sola). Sé realista. En la casa de ellos comes, tu ropa está lavada, el baño está lleno de productos para tu higiene personal y, probablemente, tienes otros problemas resueltos. Pero, ¿sabes tú lo que cuesta la compra del supermercado o cuánto se paga mensualmente de electricidad, agua, cable, etc.? Así que comienza informándote bien antes de dar ese primer gran paso en tu vida.

1. Empieza a ahorrar (¡y a informarte!) mientras vives con tus padres. Vivir solo implica mucho más que pagar alquiler o hipoteca, también tendrás gastos fijos, como electricidad, agua, gas, cable, Internet, teléfono móvil, tarjetas de crédito, el seguro de tu auto y el de tu préstamo estudiantil (si lo tuvieras). Además, están los gastos variables, como comidas, productos de higiene personal, lavado de ropa, salidas con tus amigos al cine, a tomar helado, videojuegos, etc. Así que aprovecha mientras vives en la casa de tus padres para aprender sobre gastos y presupuestos, y de paso ahorrar todo lo que puedas. Si piensas alquilar un apartamento, deberás saber que, para mudarte, tendrás que pagar los depósitos de seguridad y el primer mes. Además, deberías considerar comprar una póliza de seguro para inquilinos, puesto que es una manera inteligente de proteger tus pertenencias, entre otros beneficios. Infórmate bien con una compañía de seguros de reputación.

2. Prepara un presupuesto antes de mudarte. Primero, haz una lista de los artículos de primera necesidad que deberás tener en tu nuevo apartamento, así como los muebles indispensables, como la cama. Segundo, prepara el presupuesto al que tendrás que ajustarte mensualmente contemplando cuánto ganas y a cuánto ascenderán tus gastos. Dependiendo de esos números sabrás si tu economía te permite vivir por tu cuenta.

3. Paga tus deudas de tarjetas de crédito mientras vives con tus padres. Si no eres cuidadoso usando tus tarjetas de crédito, pudieras perjudicar tu historia crediticia por muchos años. Con lo que te ahorras viviendo con tus padres podrás darles un impulso a esos pagos, para poder comenzar tu nueva vida con más tranquilidad mental.

Por otro lado, buscar apartamento sin tener buen crédito (o ningún crédito) te hará el proceso más difícil, porque el arrendador no querrá correr riesgos y tendrás que pedirles a tus padres que firmen el contrato de alquiler de tu apartamento.

4. Crea un fondo de emergencia. Es importante que el presupuesto que te creaste para tus gastos mensuales te permita ahorrar. Un 10% de tu cheque mensual sería la cantidad ideal. Esto es importante, porque cualquier gasto imprevisto pudiera arruinar tu economía. Piensa en situaciones como la pérdida de trabajo, gastos de salud, reparación del auto, etc.

5. Sal a buscar apartamento pensando en hacer un buen negocio. Lo más importante es no tomar decisiones impulsivas. Tómate tu tiempo para visitar varios apartamentos considerando factores como: tamaño, el estado en que se encuentra la propiedad y si está localizado en un área segura, porque una vez que alquiles no podrás dar marcha atrás hasta que se venza el contrato. Otra buena opción es buscarte un roommate o compañero de habitación, para que te ayude a pagar el alquiler y otros gastos fijos, además de servirte como compañía y protección en esos primeros tiempos.

Relacionado