En pleno auge de la época dorada del cine mexicano, María Félix y Jorge Negrete brillaban no solo en la pantalla grande, sino también como una de las parejas más admiradas del país. Su boda, celebrada el 18 de octubre de 1952 en el sur de la Ciudad de México, fue todo un acontecimiento.
Pero más allá del romance y la fama, lo que capturó todas las miradas fue el deslumbrante vestido de novia de María Félix: un diseño que impuso estilo y que, hasta hoy, es recordado como un ícono del glamur clásico.
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Historia detrás del vestido de novia de María Félix
El vestido de novio que usó María Félix para su boda con Jorge Negrete, fue poco convencional, pues no llevó el clásico modelo blanco, sino uno con el que quiso rendir homenaje a sus raíces mexicanas.
Fue diseñado por Armando Valdéz Peza, un diseñador famoso por crear los diseños de vestuario de más de 30 películas del Cine de Oro Mexicano, algunas protagonizadas por María Bonita.
Como dato curioso, el vestido fue creado originalmente para que la actriz lo usara en la película que protagoniza junto a Negrete, ‘El Rapto’, pero sólo apareció en un par de escenas.
¿Cómo era el vestido de novia de María Félix?
Varios de los vestido de María Félix eran desmontables, de esta manera la actriz podría combinar las faldas con otras blusas, y así estaba elaborado su vestido de novia, elaborado en tela de lino de color rosa palo.
La parte superior del vestido era abotonado de cuello cerrado y decorado con un prendedor, mientras quer la falda estaba decorada con delicados olanes de color blanco, que usó con una enagua que aportaba volumen y movimiento.
La actriz usaría la falda de nuevo en la película ‘Flor de Mayo’, y lució el vestido completo para el Festival de Cannes de 1954.
¿Cómo fue la boda de María Félix y Jorge Negrete?
La boda se realizó en la casa de María Félix, una hermosa propiedad que llevaba el nombre de Finca de Catiopato que se ubicaba en Tlalpan. Fue una ceremonia que reunió a grandes personalidades como Diego Rivera y Frida Kahlo, Octavio Paz, Columba Dominguez, entre otros.
Se dice que La Doña y Negrete, pidieron a sus invitados vestir prendas típicas de México, pues querían que su boda representará la cultura.
