La cantante confiesa que le tocó ejercer el papel de ‘madre’ dentro de la agrupación
El veinte aniversario del mítico sencillo ‘Wannabe’ de las Spice Girls ha dado pie a que las integrantes de la banda británica -Mel C, Mel B, Victoria Beckham, Geri Halliwell y Emma Bunton- echen la vista atrás, bien sea en sus redes sociales o en entrevistas con diversos medios, para rememorar con nostalgia sus años juntas.
En el caso de Geri, una de las etapas que recuerda con más cariño es la de sus inicios, cuando sus compañeras y ella se mudaron juntas a una pequeña casa de tres habitaciones en Maidenhead, Inglaterra, en la que apenas tenían espacio para todas.
“Cinco chicas viviendo juntas en una pequeña casa de tres habitaciones en Maidenhead, a las afueras de Londres... Fue muy divertido, pero a veces resultaba complicado”, comentó la intérprete a Marie Claire.
Durante la convivencia, a Geri le tocó ejercer el papel de ‘madre’, según sus propias palabras, ya que era la única que ya había vivido fuera de casa de sus padres antes.
“Yo era la más mayor, tenía 22 años, y ya había vivido fuera de casa, así que probablemente para el resto de chicas era un poco ‘mandona’”, explicó.
Sin embargo, el rol de Geri no impidió que forjara una estrecha relación de amistad con sus compañeras.
“Emma era la más pequeña con 18 años, era como la hermana pequeña que nunca había tenido, y la adoré desde el primer momento. Mel B y yo nos convertimos en fieles compañeras, siempre metiéndonos en líos juntas. Victoria y yo mantuvimos siempre una relación de iguales, y con Melanie C compartía la fascinación infantil por la música pop y nuestras ganas de triunfar”, comentó la bella pelirroja.
