Aun esas superestrellas que nos parecen únicas y originales, tienen su contraparte en el pasado
Dicen que “mientras más cambian las cosas, más permanecen iguales”... o por lo menos eso escribió el novelista francés Jean-Baptiste Alphonse Karr en el siglo XIX. Por supuesto, él no se refería a las estrellas de hoy, pero de todas maneras, su frase se puede aplicar a algunas de las celebridades más hot y originales del momento. Y aquí te las revelamos...
MAE Y MADONNA: NACIDAS PARA ESCANDALIZAR
Todos recordamos los escándalos causados por Madonna desde que irrumpió en el mundo musical en la década de los 80, cuando sus videos fueron condenados por la iglesia católica por blasfemos y sus conciertos se consideraron pornográficos. Lo que algunos desconocen es que mucho antes de que Madonna entrara en escena, la gran Mae West estremeció al mundo con su actitud irreverente y escandalosa.
West se inició en el vodevil y era, literalmente, una mujer orquesta, ya que no solo cantaba y actuaba, sino que además escribía y producía sus obras. Su humor cargado de doble sentido, lo mismo que su lucha por los derechos de la mujer, la convirtieron en una de las figuras más controvertidas de la época.
En 1927, por ejemplo, fue condenada y encarcelada durante 10 días por “corromper la moral de la juventud” con la obra teatral Sex, que protagonizaba en Broadway. De la misma manera que el video de la canción Justify My Love, de Madonna, fue censurado y prohibida su transmisión por la TV, en 1934 el Código de Producción de Hollywood comenzó a censurar los guiones de la “peligrosa” Mae. ¿Qué hizo ella entonces? Al igual que la irreprimible Madonna, no se dio por vencida; simplemente refinó su talento para el doble sentido, pasando sus chistes atrevidos por debajo del radar de los censores. En 1970, todavía interesada en hacer olas, West participó en la película Myra Breckinridge. Basada en la novela de Gore Vidal, que exploraba el tema del transexualismo, Mae actuó al lado de dos futuros sex symbols: Farrah Fawcett y Raquel Welch. West, que murió en 1980 a los 87 años de edad, allanó el camino para la diva material y sus seguidoras, de Lady Gaga a Nicki Minaj.
FOTOGALERÍA: HEREDEROS DE LOS FAMOSOS
BRAD, ANGELINA Y JEN... ECOS DE EDDIE, LIZ Y DEBBIE
Cuando Brad Pitt dejó a Jennifer Aniston por Angelina Jolie, su coestrella en Mr. and Mrs. Smith, la saga del triángulo amoroso se convirtió en la comidilla más caliente del mundo farandulero. Por supuesto, a Jolie le asignaron el papel de “rompehogares”. Y por segunda vez ¡ardió Troya!
Lo mismo le ocurrió casi medio siglo atrás a la desaparecida Elizabeth Taylor. Después de la muerte de su esposo Michael Todd, en 1958, la belleza de los ojos color violeta comenzó un clandestino affair con Eddie Fisher, el mejor amigo de Todd. Por supuesto, cuando se vive bajo el reflector de la fama nada puede mantenerse en secreto y la noticia estalló como un reguero de pólvora. ¿El problema? Que Fisher estaba casado con la actriz y cantante Debbie Reynolds, considerada por todos como la ?dulce novia de América?, quien, además, era amiga de Liz. La rubia e inocente belleza de Debbie contrastaba con el look exótico y sexy de la Taylor, convertida en la villana de la historia.
Lo mismo ocurrió cuando Brad Pitt dejó a la “dulce novia de América” Jennifer Aniston en 2005. Una vez más, la belleza dorada de Aniston, y su fama de chica buena, contrastaron con el peligroso glamour de Angelina y su reputación de libertina. El público se puso casi unánimemente de parte de “la pobre Jen”, aumentando la fama de “devoradora de hombres” de Jolie.
Pero el tiempo todo lo cura y la historia del pasado tuvo un final feliz, ya que Reynolds perdonó a Taylor. Lo mismo no se puede decir de Jennifer y Angelina, pues aunque la primera dice que ese episodio de su vida quedó atrás y que está muy feliz con su actual pareja Justin Theroux, amigos de las estrellas aseguran que ambas se evitan en los eventos sociales de Hollywood.
JOHNNY Y CHARLIE, CORTADOS POR LA MISMA TIJERA
Llamado “el único genio proveniente de la industria del cine”, sir Charles Spencer, mejor conocido como Charlie Chaplin, tiene mucho en común con Johnny Depp. ¡Quién lo diría! Después de todo, Depp es guapo, sexy, romántico... y nadie podría ?acusar? a Chaplin de derrochar una sola onza de sex appeal.
Para comprobar que Depp es el heredero de Chaplin solo hay que repasar la evidencia: Chaplin, al contrario de otros actores del cine silente, no optó por los filmes de aventuras, como lo hizo el espadachín Douglas Fairbanks ni por los románticos, como en el caso de Rodolfo Valentino o Ramón Novarro. El actor, productor y director inglés se dedicó a los personajes caricaturescos, como el famoso “Canillita”, que utilizaba para hacer reír, a la vez que hacía reflexionar sobre el género humano.
Depp, por su parte, rechazó desde el comienzo de su carrera las poses de galán y los superhéroes de acción para convertirse en el más “chaplinesco” de todos los actores. El entierra su masculina belleza y su sex appeal en personajes estrafalarios, como el capitán Jack Sparrow, de Los piratas del Caribe; Mad Hatter, de Alice in Wonderland o Edward Scissorhands, de la película del mismo nombre. De hecho, en la comedia romántica Benny and Joon, Johnny copió el look de Chaplin ¡hasta en el sobrero de bombín!
No muy apegado al ambiente de Hollywood, Chaplin vivió la mayor parte de su vida en Europa; Depp también dejó los Estados Unidos por Francia, donde reside muy lejos del glamour. ¿Una prueba más de que Johnny y Charlie fueron cortados por la misma tijera? Uno de los sueños por realizar de Depp es, como su ídolo, hacer cine mudo.
OTRAS ESTRELLAS CON “DOBLES” EN EL PASADO
George Clooney, como hizo Cary Grant en su época, no oculta sus canas ni las arrugas alrededor de los ojos, que lo hacen más sexy. El actor de The Descendants ni siquiera permite que le apliquen maquillaje.
En una época, parecía que el irlandés Colin Farrell iba a seguir los trágicos pasos del australiano Errol Flynn, quien además de ser un conquistador compulsivo, desgastó su vida en el alcohol. Por suerte, Farrell logró vencer la adicción y hoy su meta es ser el mejor papá para sus hijos James y Henry.
La actriz de la época dorada de Hollywood Bette Davis interpretó personajes realistas, sin glamour. Para hacer el de la reina Isabel de Inglaterra ¡hasta se afeitó la cabeza! Meryl Streep, como Davis, se transforma en cada uno de sus personajes.
James Dean y River Phoenix eran guapos y talentosos. Dean, quien murió en 1955 a los 24 años de edad, cuando estrelló su auto en un horrible accidente, era adicto a la velocidad. Phoenix murió igualmente joven, en 1993, por su adicción a las drogas. Fueron parecidos en la vida... y en la muerte.
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