La cantante tuvo que cancelar los dos conciertos que tenía previstos en ese país
Selena Gomez se ha visto obligada a cancelar los dos conciertos que iba a ofrecer en Moscú y San Petersburgo, tras la negativa de las autoridades rusas a concederle el visado de entrada al país.
El veto impuesto por el gobierno se entiende como medida preventiva para evitar que la joven cantante se pronuncie sobre los derechos de los homosexuales, que en Rusia acaban de ser regulados bajo una polémica ley.
“El hecho de que a Selena le hayan rechazado el visado pone de manifiesto una vez más que el gobierno está a la defensiva y totalmente obsesionado con impedir que los homosexuales puedan vivir con normalidad”, declaró a E! Online John Becker, un activista muy popular en la lucha contra las leyes discriminatorias en Rusia.
“A fin de evitar verse en la posición de tener que reprimir violentamente cualquier manifestación favorable a la comunidad gay, el estado ha decidido vetar a Selena de la forma más discreta posible para no tener que enfrentarse a una condena unánime en el plano internacional”.
El activista está convencido de que Selena se ha convertido en una de las personalidades más influyentes entre los adolescentes homosexuales y una nueva generación de jóvenes más tolerante y abierta ante la diversidad sexual.
