Recientemente, la organizadora de la boda del príncipe Harry y Meghan Markle reveló que aunque en un principio la reina Isabel II consintió la unión, finalmente la monarca terminó por no estar de acuerdo con el matrimonio, principalmente por la actitud de la ex actriz.
Lady Elizabeth Anson, sobrina nieta de la reina Madre y ahijada del rey Jorge VI , fue quien se encargó de cuadrar todos los detalles para la boda de los duques de Sussex, pero también fue confidente de la reina Isabel, por lo cual confesó que la monarca vivió un tanto descontenta sus últimos años de vida debido a que su nieto se casó con la ex estrella de televisión.
Así lo afirma la biógrafa real Sally Bedell Smith en su Substack ‘Royal Extras’, material en cual también se afirma que la reina Isabel no estuvo nada contenta aquel 19 de mayo de 2018, mientras veía a los Sussex decir el ‘sí quiero’ frente al altar.
Al respecto, Rebecca English, editora real del Daily Mail, dijo ante el programa de YouTube Palace Confidential: “Sé por mis propias fuentes que la reina estaba desconcertada y entristecida por algunos de los comportamientos de Meghan, pero también por su comportamiento como pareja. Por supuesto, esto eclipsó sus últimos años de vida”.
¿Qué otras razones molestaron a Isabel II antes de la boda del príncipe Harry y Meghan Markle?
De acuerdo con el Daily Mail, Sally Bedell Smith aseguró que la reina Isabel también sintió molestia antes de la boda del príncipe Harry y Meghan Markle debido a que supuestamente el duque no pidió permiso al decano de Windsor para que el Arzobispo de Canterbury que oficiara la ceremonia nupcial en la Capilla de San Jorge.
Sobre esa afirmación, Rebecca English comentó: “Cuando conoces cómo estaban organizadas las cosas, realmente era territorio del Decano. De alguna manera ilustró cómo ella (Isabel II) sentía que había un malentendido fundamental por parte de la pareja sobre cómo funcionaban las cosas. Simplemente no le hacía sentir cómoda”.
Con ese gesto de rebeldía es como el príncipe Harry pudo haber arruinado definitivamente su relación con su abuela, según sentenció Sally Bedell Smith en su libro.
Asimismo, el Daily Mail afirma que Isabel II se sintió descontenta el día de la boda del príncipe Harry debido a que el novio fue grosero con ella durante diez minutos en una reunión antes del enlace. Además, Meghan supuestamente se negó a compartir detalles de su vestido de novia con la monarca.
Todo esto aunado a que Meghan Markle se negó por completo a llevar la tiara que la reina tenía pensado para ella, según han señalado otros autores reales.