Una carne suculenta y versátil de gran elegancia
TIEMPO:
40 minutos de preparación
40 minutos de cocción
*Dificultad: Media
INGREDIENTES:
- 800 g de pato deshuesado y con la piel
- 300 g de topinambur (se puede sustituir con jengibre)
- 100 g de queso robiola (se puede sustituir con requesón fresco)
- 2 huevos
- 25 g de parmesano rallado
- 100 ml de vino tinto
- 1/2 diente de ajo
- 6 bayas de enebro
- 1 vasito de ginebra
- 2 hojas de col
- 1 manojito de tomillo
- Nuez moscada
- Maicena
- Aceite de oliva extravirgen
- Mantequilla
- Sal y pimienta
PROCEDIMIENTO:
- Corta el pato en trozos y marínalos por 1/2 hora en la ginebra, el vino, las bayas de enebro machacadas, unas ramitas de tomillo y el ajo.
- Pela el topinambur, hiérvelo, muélelo en la licuadora e integra los huevos, el queso, el parmesano, una pizca de sal, pimienta y nuez moscada.
- Vierte la mezcla en 4 moldes (de 10 cm de diámetro) previamente engrasados con mantequilla, acomódalos sobre una charola forrada con papel encerado y hornea a 170 ºC por 20 a 25 minutos. Retira del horno y reserva. ?
- Corta las hojas de col en trocitos, barnízalas con aceite. Salpimenta y cocínalas por 5 minutos en horno con el ventilador a 200 ºC.
- Escurre la carne y saltea en una cacerola con poco aceite. Cocina por 8 minutos, girando y bañando con un poco de la marinada. Integra 1/2 cucharadita de maicena diluida en una cucharada de agua fría y mezcla. Sirve el pato con los pastelitos de topinambur y las chips de col.
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