La reina fue fuertemente criticada por los zapatos que usó ayer, sin embargo, este martes se repusó con el vestido low cost que portó
Si algo cautiva de la reina Letizia es justamente su forma de vestir. Hay ocasiones en las que obtiene un 10, pero hay momentos como el de ayer, donde falla por culpa de un detalle.
Los reyes de España recibieron el pasado lunes en el Palacio Real al presidente de Rumania, Klaus Werner Iohannis, así como a su esposa Carmen Iohannis, donde Doña Letizia portó un traje de Felipe Varela.
Acompañando el conjunto de su diseñador favorito, la reina usó aretes de la marca española Tous y unas sandalias que fueron fuertemente criticadas.
De acuerdo con diarios españoles, el calzado no era el apropiado por la formalidad del evento. En segundo lugar porque se ven muy casuales y, por último, acorta su pierna. Este último punto es cierto, cuando eres baja de estatura, portar zapatos con correa en el tobillo hace que visualmente te veas más pequeña de estatura.
Este tropezón fue remediado esta tarde en San Javier, Murcia.
Hoy martes, los reyes viajaron a dicha población para entregar los Reales Despachos a los nuevos oficiales en la academia. Ahí, Letizia portó un vestido bicolor de la marca Uterqüe, prenda que ya había usado en 2011.
Debido al intenso calor, la mamá de dos niñas prefirió ir con un vestido corto y no con un traje sastre como lo dicta el protocolo, hecho que molestó a algunos españoles.
Una vez más, Doña Letizia optó por strappy heels que, en esta ocasión, van ad hoc y no como los que usó un día antes.
