¿Le sigue los pasos a su madre al salir con un hombre mucho mayor que ella?
Esta historia... ¿es una repetición del pasado? Quizás sí. Pues parece que la bella Carlota Casiraghi en cuestiones de amor, le está siguiendo los pasos a su madre. de la misma manera que la princesa Carolina de Mónaco se enamoró locamente en 1977 del playboy Philippe Junot, un conquistador 17 años mayor que ella, a quien le presentaron en una discoteca parisina, ahora le ha tocado el turno a su hija Carlota, quien en una cena en París conoció al actor y humorista marroquí Gad Elmaleh, famoso por sus conquistas. La atracción que surgió entre ambos ha sido un absoluto coup de foudre (golpe relámpago).
Tanto Carlota, de 25 años, como Gad, de 40 y a punto de cumplir los 41, no han hablado de su relación, pero la prensa francesa ya ha publicado las fotos de ella saliendo muy risueña del apartamento parisino del actor. Según mis chismosos en París, la pareja ya no se está escondiendo y se les ha visto felices y apasionados en varios lugares de la ciudad.
¿Cómo comenzó este inesperado romance? ¿Qué ocurrió para que la primera semana de enero la guapa Carlota se peleara de un día para otro con Alex Dellal, su novio durante cinco años ?según dicen, él nunca esperó esta ruptura? y decidiera comenzar otro romance? Carlota y Gad se conocieron en París a comienzos de diciembre en una cena en casa de unos amigos comunes, y los que estaban presentes notaron que ambos no paraban de mirarse.
“Fue un flechazo instantáneo”, comentó un amigo del actor que prefiere quedar en el anonimato. “Gad es un conquistador nato que vuelve locas a las mujeres y Carlota no pudo resistirse”. ¿Se imaginan qué momento más peligroso para la chica, siempre reservada, que no ha conocido más amor que el de un novio francés llamado Vincent Vinckler y, desde el 2007, el del joven brasileño-inglés de 28 años, Alex Dellal? Carlota es una chica callada, muy privada, cuya experiencia con los “lobos de mar” era inexistente. Desde entonces, la pareja no se ha separado.
¿Quién es Gad Elmaleh? Sus amigos lo definen como un hombre “encantador, fascinante, que sabe conquistar a las mujeres con su galantería y sentido del humor”. Nacido en Casablanca, Marruecos, en una familia judía, Elmaleh estudió en el Liceo Francés y después se mudó a Canadá, donde se graduó de Ciencias Políticas en la Universidad de Montreal. De allí partió a Francia a estudiar drama y comenzar su carrera como humorista en 1997. Poco a poco sus shows se hicieron muy populares y pronto ocupó un lugar en el cine. Trabajó en películas francesas antes de actuar en las estadounidenses Midnight in Paris, de Woody Allen; The Adventures of Tintin, dirigida por Steven Spielberg, y Jack & Jill, con Adam Sandler y Al Pacino.
Gad se declara “un adorador de las mujeres” y entre las muchas conquistas de su vida se destacan tres mujeres: la actriz Anne Brochet (madre de su hijo Noé, que tiene 11 años), con quien vivió de 1998 al 2002; la primera ballerina de la Opera Nacional de París, Aurélie Dupont, su compañera de otros cuatro años, y la periodista Marie Drucker (terminaron en el 2010). Todas tienen el pelo oscuro, unos rostros bellos y preciosas sonrisas...
igual que Carlota. El más escandaloso de sus amores fue el que tuvo con Anne Brochet. Parecían una pareja feliz y llevaban una vida social muy activa en París, pero cuando la relación terminó, la actriz escribió con amargura el libro llamado Trajet d?une amoureuse éconduite (La trayectoria de una amante rechazada).
Sea como sea, dudamos que a Carlota las historias del pasado de Gad le importen mucho, porque si tiene el mismo carácter apasionado de su madre, nadie va a hacerla cambiar de opinión. Recordemos que en contra de los consejos de todos, la princesa Carolina marcó su destino cuando se casó con Philippe Junot en 1978, a pesar de que la princesa Grace había puesto el grito en el cielo cuando ella y el príncipe Rainiero se enteraron de quién era el hombre del que Carolina se había enamorado. Muchos se preguntan: ¿qué pensará Carolina?
Mientras tanto, Carlota luce radiante y más guapa que nunca, como corresponde a una mujer joven, enamorada y feliz.
