Un experto nos lo explica
Estamos en medio de una era en la que la monarquía, sobre todo la británica, se ha mostrado por demás accesible con la gente; por un lado, los duques de Cambridge hacen una gira por Suecia y Noruega en la que parte importante de su agenda es saludar a sus ?fanáticos?, y, por el otro, Meghan Markle, la futura esposa del príncipe Harry, ha adoptado un enfoque bastante cercano al pueblo. Pero eso, de acuerdo con un experto en etiqueta y monarquías, no es del todo bueno para la Casa Real.
William Hanson recuerda que el protocolo solía ser que no era permitido tocar a miembros de la familia real, excepto un apretón de manos, y solo si su mano se extendía primero; sin embargo, actualmente, la ?monarquía millenial? se ha suavizado tanto que es casi imposible evitar que los toquen en un evento, cosa que, a su juicio, debilita el título de ?su majestad?.
En sus palabras, el experto asegura que ?la realeza debe ser Real. No se supone que sean como ‘uno de nosotros’. Todos deben ser buenas personas, sí, y lo son, pero parece que ahora todo es demasiado informal y amistoso?. Tanta cercanía con la gente podría derivar en la caída de la monarquía, pues es el propio pueblo quien financia a la Casa Real, y ?cuanto más se comporta la familia real como una familia promedio, más débil es el argumento para darles ese financiamiento. ¿Por qué no darnos los fondos entonces a nosotros??.
Además, Hanson afirma que la mitad de las funciones de los ?royals? es establecer ciertas aspiraciones para el resto del público, por inalcanzables que puedan ser; y aunque los príncipes Harry y William estén intentando adoptar la filosofía de cercanía de su fallecida madre, ellos no son conscientes de la diferencia de propósitos, pues Lady Di lo hizo para separarse de sus suegros y su exmarido en un claro pensamiento antimonárquico.
