La vida de la millonaria bisabuela estadounidense de la princesa Diana

La vida de la bisabuela de la princesa Diana

Pocos saben que la princesa Diana se llamaba Diana Frances en honor de su bisabuela, la millonaria estadounidense Frances Eleanor Work.

Esta heredera neoyorquina contrajo matrimonio en 1880 con el aristócrata inglés James Boothby Burke Roche, tercer barón Fermoy, quien tenía muchos títulos, pero cuya familia estaba arruinada. Comencemos esta historia explicando que desde 1880 hasta 1920, más de 200 herederas estadounidenses se casaron con aristócratas ingleses, “salvando” de esta manera sus mansiones, sus castillos y sus grandes estates y country homes con los millones de sus padres. A cambio, recibieron títulos nobiliarios -fueron llamadas duquesas, condesas o ladies- y vivieron en la opulencia del Viejo Mundo. Franklin Work, el padre de Fanny (así la llamaban), nació en un pueblo de Ohio y era de origen humilde, pero trabajó muchísimo hasta amasar una fortuna de muchos millones de dólares en la bolsa neoyorquina. Aunque él no estaba a favor de que su hija se convirtiera en “moneda de cambio”, ella se empeñó en casarse con el barón Fermoy ¡y nadie pudo hacerla cambiar de opinión! Lo más curioso es que, tal como Franklin Work predijo, el matrimonio de Frances fue un desastre.

La vida de la millonaria bisabuela estadounidense de la princesa Diana

Su marido era un vago que se jugó la enorme dote que llevó su esposa a Inglaterra, y después de tener cuatro hijos -Eileen, Cynthia y los gemelos Edmund y Francis-, Frances Work, baronesa de Fermoy, se separó del aristócrata en 1891 y regresó a Nueva York. Como su padre era un hombre muy listo, le dio a su yerno una cantidad de dinero para que aceptara el divorcio, y prohibió que sus nietos regresaran a vivir a Inglaterra. A su muerte en 1911, Work dejó una herencia de 17 millones de dólares, que equivaldrían a cientos de millones en el 2015. Frances, por su parte, se volvió a casar con el profesor de equitación húngaro Aurel de Batonyi y murió en Nueva York en 1947, a los 90 años de edad. Uno de los gemelos, Edmund Maurice Burke Roche, desobedeció a su abuelo Work y regresó a Londres tan pronto cumplió la mayoría de edad, después de estudiar en Harvard y crecer como todo un millonario en Newport, Rhode Island y Nueva York, y reclamó su título de barón Fermoy. Después se casó con la bella Ruth Gill (conocida después como Ruth Roche, baronesa Fermoy), la abuela de Diana, quien fue la principal dama de honor y la mejor amiga de la reina madre Elizabeth. La pareja tuvo a su hija Frances Ruth Burke Roche -la madre de Diana-, cuya boda en la abadía de Westminster con el earl Edward John Spencer, vizconde de Althorp, fue uno de los acontecimientos sociales más importantes de Londres, con la presencia de la reina Isabel, el príncipe Felipe, la reina madre Elizabeth y la princesa Margarita. Con el tiempo, la madre de Diana abandonó a su marido y a sus cuatro hijos y se casó con el millonario Peter Shand Kydd. Frances Ruth murió en el 2004, siete años después de su hija Diana, a los 68 años. FOTOGALERÍA: LA FAMILIA DE FRANCES ELEANOR WORK

Diana no era en lo absoluto una plebeya

Esta historia corrobora que Diana Spencer tenía raíces muy aristocráticas, tanto por los Spencer como por los aristocráticos nobles irlandeses Fermoy. Ella pasaba los veranos como vecina de la familia real en su casa de campo, porque su abuelo lord Fermoy, quien murió en 1955, había rentado la bella Park House en los terrenos del castillo de Sandringham.

¿Diana con espíritu estadounidense?

Es muy curioso que de todos los hijos de Frances Ruth: lady Sarah McCorquodale; Jane, baronesa Fellowes; Diana, princesa de Gales, y Charles, noveno earl Spencer, fue la princesa Diana la que heredó el espíritu estadounidense de su bisabuela Frances Work, quien era muy decidida, llena de compasión e interesada en ayudar a los demás. Diana siempre fue una mujer muy democrática, que detestaba la rigidez del protocolo, lo que ninguno de sus hermanos compartía. Las mayores, Sarah y Jane, eran y siguen siendo frías, muy conservadoras y jamás fueron cariñosas ni comprensivas con Diana. Su hermano Charles es débil de carácter y nunca cumple sus planes, aunque habla mucho de ellos. Es pelirrojo, por la rama irlandesa de los Fermoy, y hay otros así en la familia, como el príncipe Harry. ¿Heredó Diana algo de la fortuna de los Work? No se sabe, porque los Fermoy eran muy privados y nunca se habló de eso en su testamento. ¿Algo que llama la atención? ¡Que por losWork la princesa Diana tenía sangre india americana y armenia!

Escándalos familiares

Los divorcios de los Fermoy-Spencer, en épocas en que provocaban un escándalo, llamaron la atención de la gente, comenzando con el de la bisabuela Frances, quien también se divorció de su segundo marido. Después ocurrieron los dos de la madre de Diana, Frances, pues Peter Shand Kydd la dejó en 1988 por una mujer mucho más joven que ella. También sucedieron los dos de su hermano Charles (quien está en su tercer matrimonio) y el de Diana del príncipe Carlos. Los únicos felices parecían haber sido sus abuelos Edmund yRuth Fermoy, aunque ahora se sabe que él tuvo una amante estadounidense durante 30 años y que Ruth (aconsejada por su confidente, la reina madre Elizabeth), -se hacía de la vista gorda-. Por parte de los Spencer, el padre de Diana , Edward John, VIII conde Spencer, después de su divorcio de Frances se casó con Raine -hija de la novelista inglesa Barbara Cartland-, la madrastra que Diana detestaba.

Poca felicidad

La princesa Diana “anhelaba” tener una buena relación con su madre, y desde que sus padres se divorciaron cuando ella tenía 8 años, hizo todo lo posible por lograrlo, pero Frances cuidaba más su nuevo matrimonio que a sus cuatro hijos y no fue posible. Diana y su madre no se hablaban cuando ocurrió su muerte en 1997, como consecuencia de un accidente de auto en París.

Diana y Carlos el día de su compromiso

Mirando hacia atrás, el matrimonio de Diana con el príncipe Carlos en 1981, aunque había sido muy deseado por ella, quien creía haber encontrado a su príncipe azul, tenía tantos factores en su contra, que hubiera sido difícil que el amor que sentía la jovencita de 20 años hubiera podido triunfar en el complicado mundo de la aristocracia inglesa. FOTOGALERÍA: LA FAMILIA DE FRANCES ELEANOR WORK

Por: Mari Rodríguez Ichaso
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