No sólo con cremitas ni con actitud positiva, el envejecimiento es un proceso natural e inevitable, pero eso no significa que no podamos hacer nada para retrasarlo y mejorar nuestra calidad de vida. En los últimos años, la ciencia ha dado pasos agigantados en el campo del antienvejecimiento, y una de las áreas más prometedoras es la del ADN.
Para entender el ADN del tema, conversamos con la doctora María del Mar Guerra, experta en medicina genómica y estética, CEO de MEDAE, y la doctora Esmeralda Bastidas, experta en medicina regenerativa, funcional y well-aging, CEO de NEOCLINIC. Ellas nos cuentan cómo es posible ayudar a que el organismo se “expresen” los genes que heredaste vinculados a la salud y que se “apaguen” los que pueden llevarte a desarrollar una enfermedad. ¿Magia? No, ciencia 100%.
Usa el ADN a favor de la juventud
Por mucho tiempo se pensó que la genética era destino. En otras palabras, si tus padres tuvieron Alzheimer, hipertensión o cáncer, inevitablemente tú también los desarrollarías o, en otro caso, tendrías una vida larga y saludable gracias a la buena herencia genética.
Sin embargo, se fue tomando registro de casos contradictorios, que la genética tradicional no terminaba de explicar. Y es que, la genética clásica se centra en el estudio de la herencia de los caracteres a través de la transmisión de la información genética contenida en el ADN. Pero hay una rama que nos ofrecer mejores respuestas: la epigenética.
La epigenética se enfoca en los mecanismos que regulan la expresión génica sin modificar la secuencia del ADN, revelando cómo factores ambientales y experiencias pueden influir en la activación o desactivación de genes sin alterar la secuencia genética. Para hacerlo más sencillo de entender, la genética clásica se centra en la información hereditaria contenida en los genes, mientras que la epigenética estudia la influencia del entorno y el estilo de vida.
La ciencia del antienvejecimiento
Ahora que se considera la importancia del entorno, ¿somos capaces de “activar” los genes a favor de la salud y “apagar” los vinculados a la enfermedad? Sí, y el secreto está en cuidar los telómeros.
Los telómeros son la punta de los cromosomas (que contienen el ADN), y son el escudo protector del ADN. El ADN guarda nuestro código genético, es decir, contiene las instrucciones de funcionamiento para las células del organismo y, por lo tanto, determina cómo funciona nuestro organismo, nuestras características físicas, así como el potencial para desarrollar enfermedades.
Conforme las células se dividen para regenerar los órganos y tejidos, los telómeros se acortan y ya no pueden cumplir su función protectora, permitiendo que compuestos químicos y proteínas, se unan al ADN y dirijan acciones tales como la activación de genes vinculados a la enfermedad. Las células, además, dejan de reproducirse y nuestro cuerpo pierde su capacidad de autorregeneración y enferma con facilidad. Esto explica por qué hay personas jóvenes con envejecimiento prematuro y viviendo con enfermedad de adultos mayores.
Biohacking: la revolución antienvejecimiento
¿Y qué se puede hacer? La especialidad que se ha especializado en el tema se llama Biohacking y suena de alta tecnología (un poco futurista). “El biohacking es un nuevo enfoque en la salud que busca mejorar el rendimiento humano a través del hackeo o el reseteo (reset) de la información contenida en las células, que favorecen el desarrollo de enfermedades, el envejecimiento prematuro y la pérdida de años y calidad de vida”, nos contó la especialista Esmeralda Bastidas Valenzuela.
Se trata de un enfoque personalizado, tan único como el ADN, en donde se consideran todas las variables: desde el estilo de vida y la alimentación hasta la información genética del paciente: “No todos requerimos de todos los tratamientos, por eso hay que acudir con un médico estético especializado o un dermatólogo para que nos atienda utilizando la medicina altamente exitosa denominada 4 “P": predictiva, preventiva, personalizada y participativa”, aclara la experta.”
En los últimos años, la ciencia ha dado pasos agigantados en el campo del antienvejecimiento, y una de las áreas más prometedoras es la del ADN. Gracias al Biohacking puedes lograr transformar no sólo tu vida, ¡también puedes mejorar tu carga genética! Al sanar tus células, favoreces que, si en un futuro tienes hijos, ellos heredarán una mejor genética.