A los 30 años, la actriz mexicana está alcanzando una madurez a la que pocas llegan a su edad. ¿Cómo la ha logrado? Siguiendo sus instintos. De esto y más nos habla en esta entrevista
Podría ser encasillada como la sobrina de Thalía o la exesposa de Diego Luna, pero desde hace muchos años Camila Sodi ha hecho una carrera con su propio nombre. Más inclinada hacia el cine que a la televisión, Camila está por estrenar Compadres, una cinta en la que no tiene el papel protagónico, pero en la que prefirió elegir uno al que ?le pudiera sacar el jugo?. Esto es señal de que va madurando cada vez más en un medio exigente y buena parte de esto se lo debe a su experiencia como madre (tiene dos hijos: Jerónimo, de 7 años, y Fiona, de 5), que le expandió su visión tanto artística como personal.
Camila Sodi es una apasionada del arte y en esta entrevista con VANIDADES lo deja muy claro.
¿Qué te llevó a hacer Compadres, tu nueva película?
Fue por casualidad, porque no iba a hacer esa película. En ese entonces estaba en Las Vegas haciendo promoción para Señorita pólvora y luego tuve que ir de trabajo a Los Ángeles. Mi mánager me habló estando ahí y me dijo que en Ensenada estaban haciendo una película llamada Compadres, me mandó el guion y me preguntó si me aventaba a hacer algún personaje. Me pareció una locura, pero acepté. Me fui manejando de Los Ángeles a Ensenada; es un trayecto hermoso y llegué a Compadres.
¿Qué tiene esta película que no hayan tenido otros proyectos en los que has estado?
Cada proyecto es diferente. Esta es una participación pequeña y quise darle un poco de diversión. Fue uno de esos personajes con los que uno como actor se entretiene solo. No importa tanto el tamaño del personaje, sino qué tan maleable es, qué tanto puedes hacer con él.
¿Dónde te sientes más cómoda, en el cine o en la televisión?
En el cine. La televisión es una tortura para mí, porque son muchas horas (risas) y no tienen consideración con la maternidad, así que es una lucha constante por tus derechos como mujer y como madre. En el cine pasa un poco lo mismo, pero como se crean pequeños núcleos de familia en cada proyecto, te dan más libertad. No hay reglas absurdas de los monopolios que dicen que no puedes llevar a tus hijos a comer al camerino. Para mí es mucho más agradable el proceso de creación de personajes y los ensayos.
Ahora que hablas de maternidad, tener hijos ¿te cambió en algo tu visión artística?
Hubo un cambio muy grande. Un día escuché que Kate Winslet decía que cuando dio a luz a sus hijos fue como si le regalaran una caja de herramientas nueva para su trabajo y eso es lo que se siente..., pero definitivamente entras en unas profundidades emocionales tan contundentes, que me pasaron porque fui mamá.
¿Cómo empezó tu pasión por la actuación?
Me acuerdo que acompañé a unas amigas a un casting. Eran muy guapas, altas... eran modelos. Yo tenía unos 13 años y las acompañé porque después nos íbamos a ir a comer. Me vieron sentada y me dijeron lo típico: que hiciera el casting y terminé haciéndolo. Hice el ridículo, pero al poco tiempo me llamaron y me quedé. Después empecé a hacer editoriales de moda para revistas juveniles, como Seventeen, a la vez estudiaba y me vino la rebeldía de ?ya gano dinero y no quiero estudiar?. Mi mamá me dijo que estaba loca, que tenía que terminar mis estudios, y que si me gustaba la actuación, que la estudiara. Entré a la escuela de Televisa, donde estuve seis meses y me corrieron. Lo tomé como una señal de que no era mi camino y empecé a estudiar ingeniería en audio, pensé que la música era el camino, después secuestraron a mi mamá, la liberaron y en cuanto salió me hablaron de Televisa para proponerme un rol protagónico en Miami. No era mi intención, pero fue el momento ideal para decirles a mi mamá y a mi hermana que nos fuéramos del país. Acabé la telenovela y empecé a explorar el teatro. Me fui a vivir a Nueva York y estudié en The Lee Strasberg Theatre & Film Institute; ahí me di cuenta de que me apasionaba.
¿Qué tipo de actrices te gustan?
Me gustan mucho Kate Winslet y Cate Blanchett. Siempre hacen algo diferente.
¿Qué otras pasiones tienes además de la actuación y la música?
Me gustan todas las artes. Crecí influenciada por la música clásica. Mi mamá cantaba ópera y nos llevaba a ver las orquestas que daban conciertos. Al teatro era a donde más íbamos; todos los domingos veíamos obras diferentes y decidíamos lo que nos gustaba más: las musicales o las más serias. Leer también es una de mis pasiones; es el remanso de mi día, cuando me siento más tranquila y protegida.
¿Qué te gusta leer?
De todo, el último libro que leí fue Gloria y esplendor, de Taylor Cadwell. Me gusta mucho Octavio Paz.
En cuestiones de música ya tienes un disco. ¿Cuándo viene el siguiente?
No he sacado nada últimamente porque estoy enfocada en la actuación. La música es mi hobby, y aunque mi meta no es convertirme en una estrella del pop, algún día sacaré algo.
VIDEO: Camila Sodi en portada para VANIDADES
