Entrevista con la ganadora del Oscar Lupita Nyongo

Entrevista con la ganadora del Oscar Lupita Nyongo

Lupita nos cuenta de su adolescencia y de toda su experiencia en el proceso hacia el premio Oscar

Muy pocos lo saben, pero Lupita Nyong’o, la ganadora del Oscar como Mejor Actriz de Reparto, en realidad nació en México. Y aunque después se crió en Kenia, volvió a México a los 16 años para estudiar español, un idioma que habla perfectamente, y comer tacos de carne asada, ¡que le encantan!

¿El nombre de Lupita te lo pusieron por haber nacido en México?

Bueno, aunque Lupita viene de Guadalupe y nací en México, en mi cultura es una costumbre darle el nombre a un bebé por su significado. Mi padre se llama Peter y como en nuestro idioma significa “seguir”, pensó que era bueno jugar un poco con las palabras y eligió Lupita, como una forma de seguirlo a él.

¿Tiene algún significado especial el apellido Nyong’o?

En Kenia significa “tengo derecho a opinar”.

¿Y cómo fue que naciste en México?

Mi padre era exiliado político y estaba enseñando Ciencias Políticas en el Colegio de México, en el DF. Nací cuando él tenía tres años de estar en ese país. Después crecí en Kenia y mis padres me volvieron a mandar a México, a los 16 años, para estudiar español. Pasé bastante tiempo allí durante mi adolescencia.

Pero ¿volviste sola o con la familia?

Regresé con mi hermana mayor. Estuve siete meses en el Centro de Enseñanza para Extranjeros. Para mí, México era extrañísimo, pero la gente era muy amable. Todavía me acuerdo de cuando iba en autobús hasta Oaxaca y Cuernavaca.

¿La mejor lección de aquella época?

(Piensa) En el aeropuerto, cuanto tuve que firmar el pasaporte... Tenía 16 años y nunca antes había firmado nada. Pero me dijeron que ya era una mujer y debía firmar. Esa fue mi primera lección en México: firmar un documento.

¿Podemos decir que hay un rincón hispano en tu corazón?

Por supuesto que México tiene un lugar en mi corazón. Ahí nací. Puedo decir que soy mexicokeniata (risas).

¿Cómo nació tu amor por la actuación y por Hollywood?

Crecí viendo los programas de TV americanos como Snoopy y Charlie Brown; los veía todo el tiempo. Me encantaba Linus van Pelt porque se chupaba el dedo, como yo (risas). Pero siempre fui una soñadora e inventaba historias. Mi mamá recuerda que cuando yo tenía 3 años de edad, le empecé a contar a una amiga toda una historia sobre la escuela adonde había ido ese día, cuando, en verdad, nunca había estado allí. Tampoco me parece que fue una mentira, simplemente yo vivía una realidad diferente de la del resto de la gente (vuelve a reír).

Hablando de amor... en Hollywood había nacido el rumor sobre un romance perfecto para la época, donde relacionaron a Lupita con otro ganador del Oscar, Jared Leto, pero entre risas ella es la primera en desmentirlo, “porque dicen que Miley Cyrus nos separó". Pero los rumores existieron y ella misma cuenta que “fue una locura cuando lo leí, porque tenían tantos detalles, que hasta yo empecé a cuestionarme si tenían razón”.

¿Alguna vez soñaste con el Oscar como alguna locura posible en tu vida?

No, no, no.

¿De verdad? ¿Ni siquiera después de haber ganado tantos otros premios por el mismo personaje?

Yo escuchaba a la gente diciéndome que quería que ganara, las predicciones y todo eso, pero nada fue real hasta que Christoph Waltz dijo mi nombre.

Lupita Nyong?o

¿Cómo te sentiste en ese momento?

Estaba un poco aturdida. No podía creer que tuviera el Oscar en mis manos. No podía creer que era una realidad. No sé, no sé. Fue demasiado. Pero estoy muy feliz de tener conmigo a ese hombre dorado.

¿El mejor consejo que recibiste de todos los famosos que conociste antes de ganar el Oscar?

Supongo que el mensaje que más recibí de la gente que pasó por lo mismo es que no importan los resultados de la premiación, yo ya había ganado. El trabajo estaba hecho y tenía que mantenerme positiva.

¿Lo mejor que aprendiste del espíritu humano con un Oscar en la mano?

No sé si puedo responder una pregunta así, pero puedo decirte que hoy aprendí que no necesito ser diferente. Con ser yo misma es suficiente. Y si soy fiel a mí misma, puedo permitirme cosas tan extraordinarias como este Oscar, porque aunque no pensé que podía llegar a ser posible, tampoco cancelé la probabilidad de ganarlo. Lo bueno es permitirnos pensar que lo imposible puede ser posible.

¿Es verdad que el presidente de Kenia Uhuru Kenyatta te envió un mensaje de buena suerte antes del Oscar?

Sí. En mi país están muy orgullosos de mí. En Las Vegas incluso vi un enorme cartel de “Gracias” que pusieron en Instagram. Y fue increíble verlo sostenido por cientos de personas que me deseaban suerte. Estoy muy agradecida por el apoyo mundial que he tenido. Es increíble haber logrado llegar a tantos corazones.

A quienes también te consideran mexicana, ¿cuánto crees que le pertenece el triunfo del Oscar a México?

La verdad... creo que me pertenece a mí.

Justamente fue en la capital de México donde nació Lupita Amondi Nyong’o. Su padre Peter Anyang’ Nyong’o había sido ministro de Servicios Médicos en Kenia cuando tuvo que exiliarse en México por su posición política a favor de la democracia de su país (su hermano, hasta hoy, sigue desaparecido). Su padre estaba dando clases de ciencias políticas en el Colegio de México cuando nació Lupita. Ese mismo año la familia volvió a Kenia. Fue ahí, donde con apenas 14 años, tuvo su primer papel como actriz profesional, interpretando a la mismísima Julieta, de Shakespeare, en una producción local de Nairobi, inspirada por Hollywood y las actuaciones de Oprah Winfrey y Whoopi Goldberg en The Color Purple.

Después de aprender el español en México, Lupita se fue a Estados Unidos, para estudiar teatro y cine en el Hampshire College. Al principio consiguió ciertos trabajos de producción de cine, con Ralph Fiennes en The Constant Gardener, y fue por él que decidió dedicarse a la actuación. Después de filmar en Nueva York el cortometraje East River, volvió a Kenia en el año 2008 para protagonizar la serie de televisión Shuga, sobre la prevención del SIDA. Al año siguiente, dirigió y produjo su propio documental In My Genes, sobre el tratamiento de la población albina en Kenia, y también dirigió el video musical The Little Things You Do, que fue nominado como Mejor Video en el MTV de Africa. Finalmente, la actuación volvió a tomar protagonismo en su vida cuando Lupita retomó los estudios en la famosa Escuela de Teatro de la Universidad de Yale, donde la premiaron como la Mejor Actriz con el trofeo Herschel Williams. Lupita iba a terminar sus estudios en Yale, cuando la seleccionaron para su primer largometraje: 12 Years a Slave. Pero claro, nadie imaginó que podía ser nominada al Oscar por su primera película. Y después de competir en la misma categoría como Mejor Actriz de Reparto frente a dos grandes estrellas como Julia Roberts con August: Osage County y Jennifer Lawrence en American Hustle, Lupita Nyong’o se convirtió en la nueva ganadora del premio Oscar.

Obtener un Oscar es una experiencia maravilosa para una actriz y ganarlo por la primera película...

Ya había trabajado antes como actriz, pero 12 Years a Slave fue mi primera película. No puedo creer que gané el Oscar.

¿Cómo reaccionaste cuando te contrataron para la película?

Cuando el director Steve McQueen me llamó para ofrecerme el papel, tuve mucho miedo. Pensé que se trataba de un error. Seis semanas después ya estaba en el estudio filmando la película, pero yo seguía pensando que en cualquier momento iban a venir a decirme que Steve se había equivocado (risas).

¿Qué tan difícil fue llorar en las escenas más dramáticas de la película?

Fue fácil llorar, pues me bastó imaginar lo que realmente pasó. Al mismo tiempo se siente cierta responsabilidad de transmitir los hechos, porque la gente vivía así. Para mí, tuvo mucho valor filmar esta película, para que el público pueda darse cuenta de lo que pasaba con los esclavos.

Relacionado