Cantante, actor, compositor y todo un caballero en su trato, es el hombre ideal para ser la imagen de la fragancia Play Sport de Givenchy
Fui la envidia de todas las mujeres de la oficina de redacción y de mi familia cuando supieron que iba a entrevistar a Justin Timberlake para VANIDADES. ¡Qué agradable fue conocerlo y conversar con él! El cantante, actor y compositor me sorprendió mucho por su buena educación, esa que se aprende en casa, y la noté enseguida cuando se levantó para saludar y dar la mano, y en mil otros detalles muy caballerosos. También me impresionó su sinceridad y su ingenioso sentido del humor, que acentúa sutilmente su sex appeal.
Justin Randall Timberlake es un hombre muy interesante. Nacido en Memphis, Tennessee, tiene 31 años, es alto (mucho más de lo que aparenta en las fotos o en el cine), sexy aunque sin ser “agresivo” con su atractivo, con un cuerpo cuidado y musculoso (también sin ser exagerado), ojos de esos que “hablan” mientras contesta preguntas y ríe ante mis comentarios. Todo un caballero sureño, es el hombre ideal para ser la imagen de la nueva fragancia Play Sport, de Givenchy, pues encarna al dandi moderno que sabe utilizar muy bien todos sus talentos. Curiosamente, quien no lo conozca en persona quizás no imagine lo bien educado y correcto que es (“fruto de mi madre y de mi abuela”, me dice), todo un caballero Givenchy sin lugar a dudas, y lo sencillo y natural que se comporta mientras conversamos en una suite del hotel The Standard South, de New York.
Justin ha sido de esas estrellas que siguen un camino de éxito paso a paso. Su fama comenzó siendo muy joven, en el Canal Disney, en el clásico programa The New Mickey Mouse Club, donde cantaba y bailaba su primera novia Britney Spears (a quien afirma querer mucho) y también Christina Aguilera, y donde conoció a J.C. Chasez. Poco después, él y J.C. eran parte de la famosa banda *NSYNC, de la que Timberlake era el solista.
En el 2002, Justin lanzó su primer álbum en solitario, Justified, y vendió siete millones de copias. El resto es historia, pues su éxito al dejar la banda ha sido imparable, ganando en el camino innumerables premios Grammy y Emmy. Su famoso Sexy Back ha batido todos los récords y su vida amorosa ha estado en primera plana: rompió su largo noviazgo con Britney (hubo rumores sobre romances con Beyoncé Knowles y Janet Jackson), tuvo amores con Cameron Díaz del 2003 al 2007, y su actual novia es Jessica Biel, con la que está desde el 2007, aunque se han peleado varias veces porque dicen que ella es muy posesiva. Su vida sentimental ha llenado miles de páginas.
Cuando nos reunimos, teníamos ante nosotros una vista impresionante de la ciudad de New York, que esa mañana se veía gris, y con ese ?manto? de anonimato que buscan aquí muchos famosos, empezamos nuestra entrevista.
Ya llevas viviendo en New York unos años. Debe gustarte mucho...
Me encanta, porque aquí respetan muchísimo mi privacidad y eso es muy agradable... Salgo a caminar o a correr, y si acaso alguien me saluda o me reconoce, lo hace con respeto. Además, me encanta cuando alguien me dice que le gusta mi música o cosas así. Siempre es muy agradable si lo hacen con respeto.
Aquí has abierto tus dos restaurantes Southern Hospitality, de los que, por cierto, soy una gran fan...
(Sonríe sorprendido ante mi comentario y se interesa mucho.) ¡Qué bueno saber eso! ¿Qué platos te gustan más?
El Pulled Pork Sandwich, los Catfish LollyPops y los Fried Pickles... Tu comida sureña es deliciosa.
Eso mismo me parece. Crecí comiéndola y es mi favorita hasta el día de hoy. Fíjate que mi abuela fue quien me dio muchas de las recetas de los restaurantes y las aprendí a hacer antes de abrirlos. Mi madre y mi abuela me criaron y, como ves, se aseguraron de que estuviera preparado para todo en la vida (risas mutuas)... Me gusta cocinar, aunque soy mejor haciendo pastelería. Mi abuela siempre me decía: “Justin, pon una pizca de esto o un puñado de lo otro”. Yo le respondía: “Es que mi puñado o mi pizca son más grandes que los tuyos, abuela” (risas). Por eso prefiero hacer pasteles, porque para ellos hay que usar medidas exactas. Me gusta mucho la exactitud, porque así se desarrolla la disciplina.
Cada vez que voy con mi familia al restaurante Southern Hospitality de la novena avenida esperamos encontrarte allí, porque dicen que lo visitas con frecuencia.
Sí, voy a menudo, me paro detrás del bar, controlo la música y me como un plato de Fried Pickles. Es un lugar divertido.
Siempre que te hemos visto acompañado por tu mamá en entregas de premios como los Grammys a los latinoamericanos nos ha gustado mucho ese detalle.
(Risas) ¡Es que si no la llevo me hubiera matado! Mi mamá siempre tuvo una gran fe en mí y me decía: “El día que triunfes me tienes que llevar a los Grammys”. Me dio una enorme alegría poder hacerlo y ver lo feliz que estaba. Ella se ha sacrificado mucho por mí, y es mi manera de “pagarle” sus sacrificios con algo que le ilusiona mucho... ¡Ver que disfrutó fue mi gran premio! Mi familia es muy importante para mí y por eso admiro mucho a los latinos y su cultura, porque en el sur de los Estados Unidos tenemos esas mismas costumbres. La familia extendida, de abuelos, tíos, primos, etc., es parte de nuestra vida desde pequeños, como en la de ustedes.
(Nota: ¿Habrá aprendido Justin más detalles de los hispanos cuando por varios años fue novio de Cameron Díaz, cuyo padre y abuela eran cubanos?).
¿Influyó mucho tu mamá en ti?
Mucho. Siempre me dijo: “Eres muy talentoso para la música y la comedia, pero eso no te hace mejor que nadie”. Esa frase la tengo grabada, porque me enseñó a enfrentar la vida. No me creo mejor que nadie, porque la fama y la fortuna que están aquí hoy pueden desaparecer mañana, y lo que queda eres tú y quien genuinamente eres. La vida es muy frágil, y ser una buena persona es lo más importante, ¿no crees?
¡Absolutamente! En tu caso eres actor, deportista -porque adoras el golf, por ejemplo-, músico, compositor, hombre de negocios y, además, sexy... ¿En qué categoría te sientes mejor?
No en la de hombre sexy, eso es seguro (sonríe). Me siento mejor en la de actor y de músico. Ambas carreras me apasionan y es donde me siento más cómodo, más “yo” y más creativo. Ahora precisamente acabo de empezar una película y después haré otra. En el mundo de la música lo puedo hacer todo en mi horario, a mi aire, con más libertad. ¡Y yo adoro la libertad!
Háblame de Play Sport, de Givenchy... En el anuncio publicitario estás al volante de un auto descapotable y te ves libre y feliz. Es una fragancia “fácil” y deliciosa.
¿Has dicho “fácil”? Te voy a robar esa palabra, porque la describe a la perfección... Es una fragancia realmente “fácil” de llevar, muy fresca, limpia y, al mismo tiempo, sexy. Me gusta muchísimo su aroma.
¿Qué tan importante es una fragancia para que un hombre se sienta atractivo? ¿Cómo debe ser?
Cada hombre es diferente, pero para mí debe ser una fragancia con la que me sienta bien y que no “domine” quien soy... Los hombres queremos oler como nosotros mismos y si hay una fragancia que te complemente bien y realce tu atractivo, has encontrado el perfume ideal... Por eso me gustan Play y Play Sport, pues me hacen sentir muy bien y, definitivamente, más atractivo.
¿Cuáles son las tres cosas que te hacen más feliz?
Aparte de la familia, de la que ya hablamos, el cine... ¡Adoro el cine, especialmente las películas clásicas! Puedo pasarme horas y horas viendo filmes. Después, la música, y después, la buena comida.
¿Qué te molesta y te pone furioso?
El maltrato y el abuso, especialmente a niños y a personas mayores... No soporto las injusticias ni las mentiras.
¿Eres un hombre tímido, Justin?
A veces, especialmente cuando alguien me celebra o me hace un cumplido... Realmente me da mucha vergüenza y no sé qué decir ni cómo responder, y la reacción es sentirme muy tímido.
(Justin dice “gracias” muy a menudo, especialmente cuando se le hace un halago. Lo había notado, y por eso le pregunté lo de la timidez.)
¿Eres coqueto, te gusta flirtear?
Sí (risas). Absolutamente. Los sureños somos así, y respetamos y admiramos mucho a las mujeres.
¿Eres atrevido o cauteloso?
Más atrevido que cauteloso.
¿Curioso?
Muy curioso, de todo. La vida es un aprendizaje diario que me fascina.
¿Cómo te describirías?
Ahora, como un hombre que tiene una barba (risas, pues se la dejó crecer para la película Inside Llewyn Davis, que rodaba esos días en Brooklyn, donde interpreta a un músico de los años 60). Y también quizás como un explorador... Alguien que explora la vida día a día.
