El pasado 4 de junio la reina Letizia Ortiz aterrizó en Guatemala, inaugurando así su jornada de Cooperación internacional de dos días, en la cual se mostró dentro de una faceta en la que definitivamente no estamos acostumbradas a verla, ya que no solo sacó a relucir su lado más intrépido, sino que también modificó por completo el estilo sofisticado que siempre la ha caracterizado.
Remontándonos a sus tiempos de periodista, Doña Letizia decidió sacar de su maleta sus prendas más casuales, las cuales en conjunto lanzaron un poderoso mensaje a todos quienes siguieron de cerca la visita de la royal a tierras latinoamericanas.
Al parecer, desde el momento de hacer su equipaje la esposa de Felipe VI tuvo claro que su propósito era volar lejos para que se hablara de sus acciones en favor de los sectores desprotegidos y de sus discursos en favor de promover la salud mental y en contra de toda violencia de género. Por ello, sin dar pie a que se hablara sobre sus atuendos, Letizia fue por lo simple, llevando consigo uno de los últimos regalos que recibió de manos de su marido, quien después de 20 años de matrimonio parece conocer al pie de la letra los gustos de su amada.
Letizia Ortiz empaca para su viaje a Guatemala un obsequio de Felipe VI
La especial pieza de moda con la que Letizia viajó con el fin de permanecer cómoda durante su estancia en Latinoamérica, pero también para tener siempre presente a su esposo, se trata de una camisa blanca básica la cual, según el portal ‘Vanitatis’ fue comprada por el mismísimo Felipe en una de sus visitas a las tiendas del centro de Madrid.
Según el medio citado, el rey habría obtenido la dinámica pieza en la boutique Seppia, la cual se ubica específicamente en la calle Hortaleza.
Este modelo de manga larga se trata de la expresión máxima del minimalismo, ya que su diseño completamente liso no hace más que darle la oportunidad a quien la porta de transmitir un mensaje a partir de otros elementos, ya sea moda o bien de actitud, como fue el caso de Letizia, quien hizo que el lienzo en blanco de su camisa pasara a segundo plano para dar pie a que se hablara de su altruismo.
A su vez, este especial obsequio fue claramente empacado por la reina gracias a que el diseño de la prenda otorga a su usuaria el estado máximo de comodidad, al estar confeccionada en una tela que no requiere de ser planchada y al contar con un sistema fresco que no permite que el sudor sea absorbido ni que se alberguen malos olores en los hilos.
Así que, en conclusión, el último obsequio de Felipe a la reina resultó la mejor selección de viaje para el paso de la royal por Guatemala.
