Pintores, músicos, diseñadores y hasta poetas... En el mundo de los “royals” abunda el talento en todas las expresiones del arte. Estos son los talentos ocultos de la realeza.
¿Talentos ocultos de la realeza? No hay duda de que los royals estimulan la creatividad de muchos artistas. Pero además de ser la fuente de inspiración de otros y poseer ellos mismos vastas colecciones de arte, tienen una faceta artística mucho menos conocida: algunos han sido bendecidos con muchos dones y son ellos quienes agarran el pincel, la pluma o el violín y entregan obras de extraordinaria belleza.
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Talentos ocultos de la realeza
Desde pinturas que han sido exhibidas en importantes galerías hasta joyas y cubiertos vanguardistas, aquí exploramos el lado artístico de la realeza.
Carlos de Gales
El primogénito de la reina Isabel II de Inglaterra es un gran apasionado de la pintura, particularmente de las acuarelas. Su afición comenzó durante la década de los 1970, cuando fue inspirado por Robert Waddell, quien había sido su maestro de arte en Escocia.
Luego decidió buscar la tutela de otros destacados artistas y en 1977 expuso por primera vez sus obras en el castillo de Windsor, junto con las de otros miembros de la realeza británica.
Desde entonces, el príncipe ha realizado varias exposiciones de sus acuarelas, con el acuerdo de que cualquier ingreso que se genere de las ventas de las litografías que se hacen de ellas (las pinturas nunca son puestas a la venta) se dirija a la fundación caritativa que lleva su nombre.
Aunque sus lugares favoritos para pintar son los alrededores de Sandrigham y Balmoral, dos de las residencias de la reina Isabel, el príncipe —que también estudió piano de niño y ha tocado la trompeta y el violonchelo en algunos conciertos escolares y benéficos— aprovecha sus visitas oficiales a los países lejanos para plasmar en sus lienzos paisajes de exótica belleza.
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Margarita de Dinamarca
La soberana de la casa real danesa es una de las más prolíficas artistas de la realeza europea. No solo es una experta pintora, cuyas obras han protagonizado exposiciones en importantes museos del mundo; también ha creado el vestuario y la escenografía de varias obras de teatro y películas (incluyendo el filme Los cisnes salvajes, de Peter Flinth), ha diseñado monogramas para la familia real y hasta ha ilustrado libros bajo el nombre artístico de Ingahild Grathmer, como fue el caso de la edición danesa de El señor de los anillos.
La naturaleza (“encantadora, inmensa y temible”, como la ha calificado la reina) suele ser el tema central de sus cuadros, que tienden a la abstracción.
Reina Sonia de Noruega
La esposa del rey Harald de Noruega nació con la vena artística. Así lo ha reconocido ella misma en diferentes entrevistas.
“Cuando era niña, trataba de imitar a Picasso”, ha dicho la reina. “El arte contemporáneo me gustó desde siempre”.
Y su pasión nunca la abandonó. Además de haber sido una coleccionista activa desde hace muchos años, en el 2012 decidió debutar como artista y exhibió por primera vez sus grabados, realizados a partir de fotografías que ella misma había tomado durante un viaje a Svalbard.
Gracias a la venta de sus obras, la reina logró crear su propia fundación y ahora financia un premio que lleva su nombre: Queen Sonja Nordic Art Award, el cual se concede cada dos años y tiene como objetivo ayudar a los artistas jóvenes.
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Emperador Naruhito
La música siempre ha ocupado un lugar privilegiado en la vida del emperador de Japón, quien desde muy temprano fue instruido en ese arte.
Su virtuosismo tocando instrumentos, incluyendo la viola y el violín, lo ha llevado a participar en varios conciertos, en los que siempre recibe ovaciones cerradas.
Su única hija, la princesa Aiko, también comparte su afición musical. Desde muy temprana edad, ya ha demostrado sus increíbles habilidades tocando el violonchelo y cuenta con una vasta experiencia como integrante de la orquesta de su escuela.
Rey Bhumibol Adulyadej de Tailandia
El rey Bhumibol Adulyadej de Tailandia, o Rama IX, como es conocido en su país, toca el saxofón, el clarinete y compone música que ha llegado hasta Broadway.
Su interés comenzó desde niño, cuando estudió piano en la ciudad suiza de Lausana. Al inicio se concentró en la música clásica solamente, pero después se apasionó por los instrumentos de viento y el jazz, que le daba más libertad para improvisar.
Con su rostro siempre serio y su mirada distante, te sorprenderá saber que el monarca con el reinado más largo del mundo (subió al trono en 1950, dos años antes que Isabel II de Inglaterra) ha hecho gala de su virtuosismo musical públicamente.
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Henrik de Dinamarca
Al igual que su esposa, la reina Margarita, el príncipe Henrik es un gran artista e intelectual; pero su verdadera pasión son las palabras.
Graduado de literatura francesa e idiomas orientales, el príncipe consorte de Dinamarca ha escrito varios libros, incluyendo: Chemin faisant (un volumen de poemas en francés, 1982), Destin oblige (un libro de sus memorias, 1996), Cantabile (una antología poética ilustrada con collages creados por la reina Margarita, 2000), Murmures de vent (una colección de poesías publicada en francés y danés, 2005) y más recientemente Fábula (otro libro de poemas publicados en el 2011).
Al príncipe poeta, como muchos le llaman, también le gusta recitar sus versos en público.
Princesa Eugenia
La hija del príncipe Andrés y Sarah Ferguson es graduada de historia del arte y ha trabajado para la casa de subastas Christie’s y la galería de arte Paddle8, en Nueva York.
Recientemente incursionó en el diseño de joyas, creando una línea de brazaletes con fines caritativos. Realizados en oro, oro rosado y plata, la propia princesa ya ha lucido sus diseños en varias ocasiones.
Todas las ganancias de las ventas están siendo destinadas a la Royal National Orthopedic Hospital’s Redevelopment Appeal, organización que se dedica al tratamiento de los niños con escoliosis, de la que ella es patrocinadora.