La actriz de ‘The O. C.’ recuerda con nostalgia la etapa de crisis que la llevó incluso al psiquiátrico
El final de la serie ‘The O. C.’ no solo significó el fin de un fenómeno adolescente en la televisión sino que también supuso el adiós de Mischa Barton a Hollywood y su regreso a su natal Londres, ciudad que dejó junto a su familia cuando tenía cinco años.
“Llegó un momento en el que necesitaba espacio. Necesitaba redescubrir lo que me gustaba de ser actriz porque, en algún punto, me robaron los buenos momentos de esta profesión al estar siempre bajo el microscopio”, se desahogaba la actriz en una entrevista a People.
Mischa se mudó a Londres en 2007 para reconectar con su antigua vida lejos del foco mediático, incluso volvió a recuperar el contacto con sus antiguos compañeros de la escuela de arte dramático (Academy of Dramatic Art) a la que asistía en verano.
“Era uno de esos momentos en los que las cosas solo pueden ir a mejor o a peor. Así que me mudé a Europa para poder ser capaz de tomarme mi tiempo y explorar quién era y quién quería ser. Necesitaba ese tiempo para mí, para explorarme a mí misma y reconectar con mis raíces. Necesitaba tiempo para ser yo misma, una persona normal. El equilibrio es importante. Soy feliz de haber podido tener ese tiempo en mi vida”, afirmaba Mischa.
No obstante, a pesar de las dificultades y de haber sido puesta bajo vigilancia psiquiátrica después de que en 2009 amenazase con suicidarse, la exestrella juvenil mira hacia su pasado con gratitud.
“Tenía 17 años y acababa de salir del instituto en Nueva York cuando fui elegida para protagonizar ‘The O. C.'. Fue un gran momento de mi vida y estoy agradecida por ello, ahora soy capaz de aceptarlo y ser feliz”, asevera la actriz.
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