La historia detrás de la famosa entrevista de 1995 de la princesa Diana sigue revelando capas profundas de engaño y consecuencias emocionales que cambiaron el rumbo de su vida. A casi tres décadas del suceso, Patrick Jephson, su exsecretario privado y uno de los asesores más estables de su círculo, comparte cómo fue quedar al margen justo cuando la princesa más lo necesitaba.
Su testimonio, respaldado por nuevas investigaciones, expone no solo la manipulación mediática de la época, sino también el impacto devastador que tuvo en la confianza de Diana y en las decisiones que marcaron su destino.
La manipulación que fracturó un lazo de confianza
De acuerdo con el libro “Dianarama: Deception, Entrapment, Cover-Up: The Betrayal of Princess Diana”, del periodista Andy Webb, Martin Bashir, entonces reportero estrella de la BBC, convenció a la princesa de que Jephson y otros colaboradores cercanos la estaban espiando. Documentos falsificados, historias alarmantes y el aprovechamiento del ambiente de sospecha que ya rodeaba a la royal crearon el escenario perfecto para sembrar la desconfianza.
Jephson recuerda que la actitud de Diana cambió abruptamente. Sin explicaciones, la princesa comenzó a alejarse de él, hasta finalmente excluirlo de las decisiones más delicadas, incluida la participación de su entrevista con “Panorama”.
Años después entendería la magnitud del engaño: “Fue escalofriante, inquietante y cruel”, declaró el exasistente, según lo recabado por “People”.
Por más de 25 años, yo creía que había fallado en su labor, cuando en realidad él también había sido una víctima de la manipulación.
La entrevista secreta que definió el destino de la princesa
Impulsada por el miedo, la desconfianza y el deseo de controlar su propia narrativa, Diana decidió grabar la entrevista sin informar a quienes tradicionalmente la protegían. La emisión reveló detalles inéditos sobre su matrimonio, su salud emocional y su realidad dentro de la familia real, provocando una sacudida mediática mundial.
En 2021, una investigación encabezada por Lord Dyson confirmó que Bashir no solo manipuló a Diana, sino que la BBC encubrió las irregularidades. Años después, la cadena aceptó su responsabilidad y pagó una indemnización a Jephson, quien finalmente pudo comprender lo que había ocurrido en la sombra.
Consecuencias que se extendieron hasta los últimos meses de vida de Diana
Para Jephson y quienes estuvieron cerca de la princesa, la desvinculación de su equipo de confianza produjo repercusiones graves. En sus últimos meses, Diana se apoyó en personas sin preparación para resguardar su seguridad ni gestionar su agenda.
“Si yo hubiera seguido a cargo, habría habido supervisión adecuada de su visita a París”, lamentó Jephson.
El accidente del 31 de agosto de 1997, provocado por una persecución de paparazzi y un conductor que no estaba en condiciones de manejar, dejó en evidencia la vulnerabilidad en la que Diana se encontraba. Su amiga Rosa Monckton afirma que las nuevas revelaciones explican el comportamiento errático de aquella época: desconfiar de todos, cambiar de número telefónico constantemente y vivir bajo presión emocional.
La historia que hoy se conoce de la entrevista de “Panorama” no es solamente la de un escándalo mediático, sino la de una princesa que, empujada por el miedo y la manipulación, quedó aislada de quienes realmente querían protegerla.
Hoy, su legado permanece, pero también la reflexión sobre qué habría sucedido si las cosas hubieran sido de distinta manera.