La monarca, de 91 años, habló, como pocas veces, sobre su matrimonio con el duque de Edimburgo
La reina Isabel elogió la capacidad de recuperación de Londres y Manchester tras “terribles ataques” en su reciente mensaje de Navidad, en el que también rindió homenaje a su esposo, el príncipe Felipe, quien este año se retiró de sus deberes reales.
El príncipe, de 96 años, también conocido como el duque de Edimburgo, ha estado en el lado de la reina a lo largo de sus 65 años en el trono, y regularmente ha acaparado los titulares con varios de sus comentarios.
Isabel, la monarca reinante más longeva del mundo, rara vez habla de su marido, pero esta vez quiso hacerlo mencionando con humor su aniversario de bodas de titanio, que se celebró en noviembre.
“No sé si alguien inventó el término ‘titanio’ para el 70 aniversario de bodas cuando yo nací. No esperaban que durara tanto”, dijo con una sonrisa.
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La reina también habló sobre la importancia del hogar en su alocución, y el sentido de comunidad en Londres y Manchester después del devastador incendio de la torre Grenfell en la capital de Inglaterra y los ataques terroristas en ambas metrópolis.
?Las ?poderosas identidades? de la capital y de la ciudad del norte de Inglaterra brillaron tras los ataques de los milicianos y un devastador incendio que destruyó la torre residencial Grenfell en Londres?, agregó.
La soberana, cuyo discurso televisado ya es una tradición navideña en Gran Bretaña, expresó que había sido un privilegio visitar a las víctimas del ataque en un concierto de música pop en Manchester, ya que pudo presenciar la valentía y resiliencia de los sobrevivientes de primera mano.
Finalmente, señaló que sus reflexiones sobre el año la habían hecho “agradecida por las bendiciones del hogar y la familia?.
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