Meghan Markle tendrá que hacerle reverencia a Kate Middleton

Meghan Markle tendrá que hacerle reverencia a Kate Middleton

La futura esposa del príncipe Harry se deberá aprender los rangos de los miembros reales para saber a quiénes saludar con respeto

70 años después de que el príncipe Felipe le hiciera una reverencia a su suegro, el rey George VII, al ser presentado ante él, esta tradición aún continúa aunque es un poco más complicada para las mujeres de la realeza.

De acuerdo con los protocolos, los hombres tienen la fácil opción de inclinarse ante todos los que encuentran. Pero para ellas, toda esta etiqueta parece un campo minado social, ya que no pueden hacerlo ante cualquiera, entonces ¿a quién le deben hacer una reverencia y de quién van a esperar una? ¿Cuándo deberían hacerlo? ¿Con qué frecuencia?

Esto es tan solo una parte de la etiqueta real que le espera a la prometida del príncipe Harry, Meghan Markle.

Hacer una reverencia, dentro de los confines de la corte real, no es solo un acto físico, sino también político. Las reglas y el orden jerárquico pueden cambiar y guardan poca relación con el orden de sucesión.

Se espera que Meghan se familiarice rápidamente con aquellos que están arriba y debajo de Harry y ella. Por su parte, como guía y mentor, su futuro esposo tendrá que explicarle meticulosamente el protocolo.

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¿A Sophie, condesa de Wessex, royal desde 1999? No, a ella no. Pero sí tendría que hacerlo si el príncipe Eduardo, su esposo, está en el mismo lugar.

Esto indica que la presencia del marido real es lo que “valida” el estatus de la esposa.

¿Tendría que saludar de la misma forma a la princesa Ana? Sí, ella es la hija de la soberana. ¿A las princesas Eugenia y Beatrice? Sí, pero si Harry no está en la misma habitación tampoco.

¿Qué pasa si la prima de la reina, la princesa Alexandra, los visita? Ahora a sus 80 años, se le considera más regia que Isabel II, con dos miembros de la realeza como padres (el príncipe Jorge de Kent, cuarto hijo de George V, y la princesa Marina de Grecia y Dinamarca), por lo tanto sí debe hacerle reverencia.

Luego está la cuñada de Alexandra, la princesa Michael de Kent, de quien, dice la leyenda, que la reina al ser informada de sus antecedentes reales europeos, comentó: “suena demasiado grandiosa para nosotros”. Cierto o no, Meghan nunca tendrá que saludarla de esa manera. Tampoco tendría que hacerlo con la hija de la princesa Ana, Zara Phillips, quien a pesar de ser una miembro de sangre real todavía estará por debajo de la actriz estadounidense en la jerarquía, sin embargo, sí tendría que hacerlo si Harry está presente.

Como se puede ver, es un negocio bastante complejo, las normas actuales se encuentran en un documento redactado en 2005 por el secretario privado de la reina, y que circula solamente entre los miembros de la familia y los cortesanos. Titulado Precedence Of The Royal Family To Be Observed At Court, su propósito, realmente, era aclarar el lugar de Camilla Parker en la corte después de su matrimonio con el príncipe Carlos.

Como la nueva esposa del príncipe de Gales, Camila debió de haber quedado en segundo lugar de la línea de rangos después de la reina, como la princesa de Gales, posición que ocupaba Lady Di. Sin embargo, debido a las circunstancias y la evolución de su relación con Carlos, Camilla se movió dos lugares abajo.

“Esto fue hecho por orden de la princesas Ana y Alexandra, quienes habían dado sus vidas adultas al servicio real”, dijo un excortesano.

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