Tara Palmer-Tomkinson fue encontrada muerta en su departamento en Londres este miércoles
Considerada una it girl de la escena británica de los noventa, Tara Palmer-Tomkinson falleció este miércoles a los 45 años.
Tara fue encontrada por los policías en su domicilio, ubicado al sureste de Londres. Aunque hasta ahora no hay sospechas sobre su muerte, aún no hay indicios de qué pudo haberla provocado.
Palmer-Tomkinson había anunciado en noviembre del año pasado que le había sido detectado un tumor cerebral no maligno y que comenzaría con tratamiento.
Tara era hija del esquiador olímpico Charles Palmer-Tomkinson y Patricia Dawson, quienes son grandes amigos del príncipe Carlos y su esposa Camilla. De hecho, es tan buena la relación entre Charles y el heredero al trono de Inglaterra, que decidió pedirle que fuera el padrino de su hija y el príncipe accedió.
Incluso, tras el público divorcio de Diana y Carlos, el royal se refugió en el apoyo de la familia Palmer-Tomkinson y cada año iba con ellos a esquiar.
NOTA: La familia política de los “royals”
Tara era colaboradora de publicaciones como GQ, The Observer e Instyle. En 2007, publicó un libro junto con Sharon Marshall, titulado como The Naughty Girl’s Guide to Life.
Gracias a sus conexiones con la realeza y la sociedad británica se convirtió en la favorita de revistas del corazón y tabloides, quienes buscaban a toda costa captarla en sus noches desenfrenadas de fiesta.
En 2006 hizo pública su adicción a la cocaína, razón por la que tuvo que someterse a una cirugía para reconstruir su nariz. Años después, en 2014, protagonizó un escándalo en el aeropuerto de Heathrow, Inglaterra, al ser arrestada por alterar el orden público.
Su romance más sonado fue con el cantante británico James Blunt en 2006. En ese entonces, Palmer declaró que solamente habían salido un par de veces.
A diferencia de Sarah Ferguson, cuyos escándalos le valieron convertirse en persona non grata de la familia real, Tara y su familia siempre mantuvieron una relación estrecha con el príncipe de Gales.
Tras darse a conocer la noticia de su muerte, un vocero del palacio ha informado que el príncipe Carlos y su esposa se sentían ‘profundamente tristes’ por su pérdida.
NOTA: La infelicidad en las casas reales
