Si eres de las que le dice a su novio o esposo “bebé" u “osito”, ¡felicidades!
Mucha gente se burla de las personas que usan apodos cursis para nombrar a su pareja. “Bebé", “osito”, “mi vida”, “mi cielo” son algunos de los sobrenombres que escuchamos comúnmente.
Pero, aunque no lo creas, esta afectuosa costumbre puede ser muy benéfica para las personas que la llevan a cabo.
De acuerdo a una investigación llevada a cabo por la revista científica estadounidense Personal Relationships, se llegó a la conclusión de que las parejas que utilizan estos apodos entre sí tienden a vivir relaciones más duraderas y fuertes.
Los investigadores explican que usar estos sobrenombres con frecuencia, genera mayor sentido de pertenencia y singularidad en la relación amorosa. Esto se debe a que, al hacerlo, nuestro cerebro interpreta que para esa persona somos únicos, pues ninguna otra persona le puede llamar así.
Así, decirle “príncipe” o “mi amor” a tu pareja generará un vínculo más profundo y estable.
Además, para quienes hicieron el estudio científico, estos motes también reflejan la buena comunicación que hay entre las parejas, lo que es muy bueno para la relación.
Y tú, ¿cómo le dices a tu novio o esposo?