Los duques de Cambridge festejan en familia

Los duques de Cambridge festejan en familia

Los recién estrenados padres tuvieron una reunión íntima en el palacio de Kensington

Entre los asistentes a la íntima celebración que se organizó en el palacio de Kensington estaba la hermana de la duquesa de Cambridge, Pippa Middleton, quien no pudo perderse la oportunidad de conocer a su recién nacido sobrino, cuyo nombre todavía se desconoce.

La hermana de Catherine llegó anoche a la residencia de los duques de Camdridge, al oeste de Londres, junto a su pareja, Nico Jackson, momentos después de que William y Kate llegaran al palacio tras su comparecencia ante los medios a las puertas del hospital St. Mary.

Los duques de Cambridge tienen planeado permanecer en el palacio de Kensington durante dos semanas, periodo en que William se dedicará a cuidar de su primogénito durante un descanso de sus funciones en las Fuerzas Aéreas Reales (RAF).

Tras esas dos semanas, Catherine se trasladará a la residencia de sus padres, en Buckinghamshire, para pasar otras seis semanas hasta que se acostumbre a sus nuevas tareas como madre.

Ayer por la tarde, los duques de Cambridge posaron alegres frente a las cámaras a la salida del hospital donde Kate dio a luz el día anterior. Además de manifestar la felicidad que estaba viviendo su familia por la llegada de su primogénito, William dejó entrever el tormento al que ya les estaba sometiendo el bebé.

“Lo que es seguro es que tiene un buen par de pulmones. Es un hombrecito enorme y pesa mucho. Todavía seguimos pensando en el nombre así que lo sabran tan pronto como lo decidamos”, reconoció ayer entre los medios.

Por su parte, Catherine se contentó con expresar de forma concisa el momento tan especial que estaba viviendo.

“Es un momento muy emotivo, un momento muy especial. Cualquiera que haya sido padre puede entender”, se sinceró.

Isabel II ya conoce a su bisnieto

La monarca se acercó esta mañana al palacio de Kensington para visitar por primera vez al hijo de los duques de Cambridge y para dar la enhorabuena a los felices padres, quienes pasaron su primera noche en casa junto al pequeño.

Isabel II, que llegó en el asiento trasero de un Bentley verde, habría realizado una visita de aproximadamente 30 minutos al recién nacido antes de regresar sola al palacio de Buckingham para preparar el viaje a su residencia de Balmoral, Escocia, --previsto para el próximo viernes-- donde disfrutará del periodo estival.

Temerosa de no poder disfrutar de sus vacaciones, la semana pasada la propia reina aseguró que esperaba que el bebé naciera pronto porque estaba deseando descansar unos días en su refugio escocés.

Quien todavía no ha podido conocer a su bisnieto es el duque de Edimburgo, inmerso en su proceso de recuperación en el castillo de Windsor después de la cirugía abdominal a la que fue sometido el mes pasado.

Tras el anuncio de la llegada al mundo del esperado príncipe de Cambridge --tercero en la línea de sucesión al trono--, Isabel II admitió en una recepción en el palacio de Buckingham estar “emocionada” con el nacimiento de un “niño tan grande” (3.8 kilos), añadiendo que siempre “el primero es muy especial”.

Relacionado