Aunque para añadir un toque romántico a la historia de los príncipes William y Kate, muchos mencionan que ambos fueron el respectivo primer amor del otro, la realidad es que en sus historiales amorosos existieron historias previas. En el caso de Catherine con Harry Blakelock y en el de William con Rose Farquhar, a quien los medios describen como “el primer amor” del heredero.
Rose Farquhar y el príncipe William fueron novios en el año 2000, en la época en que el príncipe Guillermo se graduó en el Eton College, antes de que el primogénito ingresara a la Universidad de St. Andrews, donde conoció a quien terminaría siendo la madre de sus hijos.
De acuerdo con la revista Tatler, los entonces jóvenes enamorados se conocieron en el Beaufort Polo Club de Gloucestershire, un lugar fuertemente asociado con la Caza de Beaufort, de lo que solía ser aficionado el padre de Rose, “El Capitán”, Ian Farquhar.
En ese entonces las condiciones eran óptimas para que el romance entre William y Rose floreciera, ya que los padres de ambos mantenían una estrecha amistad. Sin embargo, el romance entre ellos duró muy poco, debido que al término del verano, el príncipe tuvo que partir al norte para iniciar con su formación universitaria.
¿Qué fue de la vida de Rose Farquhar, “el primer amor” del príncipe William?
Tal y cómo se afirma desde Tatler, Rose se convirtió en cantante y en 2006 apareció en How Do You Solve A Problem Like Maria?. Asimismo, el medio afirma que la mujer consiguió llegar a los octavos de final del programa con éxito, “con la esperanza de aparecer en el escenario del West End en una producción de The Sound of Music”, aunque finalmente no logró entrar en escena.
También, de acuerdo a los reportes de la prensa, salidos en el invierno de 2022, se sabe que la hija de “El Capitan” se casó con George Gemmell, un aspirante a veterinario e hijastro del difunto magnate de la construcción barbadense Sir Charles Williams. El príncipe William habría estado presente en este enlace.
La boda se celebró en la iglesia de Santa María la Virgen en Tetbury, Gloucestershire, que era una encantadora y perfecta imagen invernal cubierta de nieve, de acuerdo con Tatler, mientras que el príncipe William asistió vestido con una elegante corbata negra e hizo su entrada discretamente por la puerta trasera de la iglesia para presenciar el momento en que la pareja pronunciaba sus votos.