Shakira y Piqué confirman su separación. La cantante colombiana confirmó a través de un comunicado que se está separando de su pareja, Gerard Piqué, de 35 años y futbolista del FC Barcelona, con quien sostuvo una relación de 12 años y tuvo dos hijos: Sasha (de 7 años) y Milán (de 9 años).
“"Lamentamos confirmar que nos estamos separando. Por el bienestar de nuestros niños, que son nuestra máxima prioridad, pedimos respeto a la privacidad. Gracias por su comprensión”, decía el comunicado divulgado por la agencia de comunicación de la cantante.
Esta confirmación vino después de una ola de rumores en donde se decía que Piqué ya había vuelto a su departamento de soltero en Barcelona, además de que algunas fuentes confirmaron haberlo visto de fiesta con su grupo de amigos y sin la cantante.
Por otro lado, también se comentó que la separación de la pareja se había dado debido a que la cantante colombiana se enteró de una supuesta infidelidad de Piqué con una mujer de 20 años, lo que fue la gota que derramó el vaso. Cabe destacar que la pareja nunca estuvo casada, por lo que no se habla de divorcio, pero sí se especula sobre la custodia de sus dos hijos.
Shakira: infidelidad, rumores de defraudación de Hacienda y separación con su pareja
Aunado a los rumores de la supuesta infidelidad cometida por parte de su pareja, así como la confirmación de su separación, Shakira está enfrentando también la acusación de la Fiscalía de Barcelona por defraudación a Hacienda por 14.5 millones de Euros aproximadamente.
A pesar de presentar pruebas apelando a la inocencia de la cantante, el tribunal ha negado el último intento de la defensa para que se archive la causa y ha dicho que sí hay indicios suficientes para que Shakira enfrente un juicio por ocultar sus ingresos y simular no residir en España, esto a pesar de que la cantante ha devuelto ya los 14.5 millones, más intereses, que le exigía Hacienda.
La resolución de este último intento de defensa, es que Shakira era residente habitual de España desde 2012 y permanecía en el país 183 días, lo que le obliga a pagar impuestos, no considerando sus “salidas ocasionales, puntuales o esporádicas” del país.