La familia real británica vuelve a estar en el centro de la atención mediática. En los últimos días, una declaración de la periodista Emily Maitlis, que en el 2019 entrevistó al príncipe Andrés en su controversial aparición en “Newsnight”, desató versiones sobre una supuesta advertencia del príncipe William hacia sus primas, las princesas Beatriz y Eugenia de York. Según Maitlis, en el Heredero al Trono habría insinuado la posibilidad de “reexaminar” sus títulos si no intervenían para persuadir a su padre de abandonar Royal Lodge. Sin embargo, el Palacio de Kensington ya respondió de forma tajante: no existió tal reunión y, además, William no tiene la autoridad constitucional para retirar títulos reales.
Un nuevo capítulo en la historia del príncipe Andrés
La polémica surge en un momento especialmente delicado para el exduque de York. Desde su retiro de la vida pública por sus vínculos con Jeffrey Epstein, Andrés se enfrentaría a la presión del Palacio de Buckingham para ahora desalojar Royal Lodge, su residencia de más de 30 habitaciones en Windsor, donde ha vivido durante dos décadas. A esto se suman las críticas por el alto costo de mantenimiento y el cuestionamiento sobre el dinero público involucrado.
Las declaraciones de Maitlis realizadas en su podcast de “New Agents” encendieron las especulaciones. Según la periodista, se habría buscado ejercer presión a través de Beatriz y Eugenia, sugiriendo que sus títulos podrían ponerse en juego si no mediaban con su padre.
¿Cuál fue la respuesta oficial del Palacio de Kensington?
Ante el creciente revuelo, un portavoz del Palacio de Kensington desmintió rotundamente la versión: “No hubo ninguna reunión entre el príncipe de Gales y las princesas Beatriz y Eugenia”, declaró a medios británicos, añadiendo para “Mirror” que sería incorrecto afirmar que William tiene potestad alguna para retirar títulos reales.
Constitucionalmente, dicha prerrogativa solo recae en el monarca, en este caso el rey Carlos III, y requiere de un proceso formal aprobado por el parlamento. De esta manera, la aclaración busca frenar los rumores y evitar que la atención mediática agrave aún más la ya delicada situación de la familia de York.
El perfil discreto de las princesas de York
Las princesas Beatriz y Eugenia han mantenido una vida relativamente reservada dentro de la familia real. Ambas combinan sus deberes institucionales con carreras profesionales fuera del palacio y suelen evitar los escándalos públicos. A pesar de los problemas que rodean a su padre, las hermanas continúan disfrutando del cariño de la familia Windsor y del respeto de la prensa británica, que las percibe como figuras discretas y modernas.
El supuesto conflicto entre el príncipe William y las princesas de York parece ser, por ahora, un malentendido amplificado por la prensa. Con la declaración del Palacio de Kensington se disipa la idea de que el heredero al trono está involucrado en maniobras de presión familiar. Aun así, la controversia evidencia cómo las tensiones en torno al principio Andrés continúan proyectando su sombra sobre la monarquía británica.