Ana Bolena fue la segunda esposa de Enrique VIII, y reina consorte de Inglaterra hasta el 19 de mayo de 1536, cuando fue decapitada por ordenes de su propio esposo; sin embargo, parece que no dejó del todo la corte. Conoce la historia del fantasma de Ana Bolena.
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¿Cómo era el físico de Ana Bolena?
Desde el comienzo, Ana fue rechazada por el pueblo inglés, no sólo por haber sustituido a Catalina de Aragón en el trono, sino también por su aspecto físico.
Se dice que Ana no era una gran belleza, solo era moderadamente bonita. En aquella época el ideal de belleza era la piel blanca como la leche, cabello rubio y ojos claros, y Ana era de piel morena, cabello y ojos oscuros, pero con un gran poder de seducción.
Ana tenía una personalidad que encantaba a los hombres, por lo que causaba sensación entre los hombres de la corte, incluyendo al rey, que lo dejó todo para casarse con ella.
“El encanto de Ana estaba no tanto en su aspecto físico como en su viva personalidad, su elegancia, su agudo ingenio y otras habilidades.
Destacó en el canto, componiendo música, bailando y conversando. No era sorprendente, por tanto, que los jóvenes de la corte pulularan a su alrededor”, relata la historiadora Alison Weir en ‘Enrique VIII, el rey y la corte’.
¿Por qué se ejecutó a Ana Bolena?
De acuerdo con los historiadores, Ana Bolena rondaba en los treinta y tantos años cuando fue decapitada. Su propio esposo la había acusado de adulterio, apenas tres años después de haberse casado.
Ana fue encarcelada en la Torre de Londres, donde permaneció cerca de 17 días hasta que fue condenada a muerte en un juicio lleno de conspiraciones, en el que su propio esposo participó.
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La reina había sido acusada injustamente de adulterio e incesto, y se dice que su fantasma sigue rondando por la Torre de Londres y otros lugares emblemáticos de la realeza.
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El Castillo de Hever, donde ella y sus hermanos crecieron, la Torre de Londres, donde fue asesinada, en la Iglesia de Salle donde se dice que yace su cuerpo y en Marwell Hall, donde Enrique y Jane se hospedaron durante su ejecución de Ana.
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