Hace unos días, los rumores sobre el posible reencuentro del príncipe Harry con el rey Carlos III comenzaron a acaparar los titulares internacionales. Con motivo de su participación en los Premios WellChild, el hijo menor de Carlos estará regresando por primera vez desde abril al Reino Unido el próximo lunes 8 de septiembre.
Ante las expectativas de cómo se llevaría a cabo esta reunión, expertos en realeza contemplaban la posibilidad de un acercamiento que culminara en “reconciliación”; sin embargo, hoy el panorama de este viaje vuelve a teñirse de incertidumbre y desesperanza luego de que se diera a conocer que el príncipe había expuesto tres condiciones clave para poder propiciar el reencuentro con su padre, el rey Carlos III, exigencias que amenazan con complicar, una vez más, el acercamiento.
Las tres condiciones de Harry para reconciliarse
De acuerdo con reportes recientes, Harry habría planteado tres requisitos que, desde su perspectiva, considera esenciales para aceptar este encuentro. La primera es que se le garantice seguridad tanto a él como a Megan, pues se siente vulnerable ante la exposición de paparazzis. El príncipe también solicitó gestión del control mediático desde el Palacio con el fin de evitar filtraciones o una cobertura indiscreta de su visita, especialmente si su esposa llega a participar en futuras apariciones. Y la tercera, el príncipe solicitó el tratamiento protocolario respectivo para Meghan, es decir, que se incluyan saludos formales como “Su Alteza Real” y reverencias.
Reconciliación posible, pero compleja
De acuerdo con lo reportado por el publicista Rob Shuter, quien cuenta con informes de fuentes cercanas al príncipe Harry, estas condiciones no tienen muy feliz al príncipe William, mostrando cierta resistencia a aceptarlas, especialmente la última, dejando en evidencia la posible tensión entre ambos hermanos.
Hasta el momento, el Palacio de Buckingham no ha emitido una respuesta definitiva, aunque han dejado abierta la posibilidad de dialogar para llegar a un acuerdo que permita un acercamiento pacífico entre padre e hijo. Hace unos días, representantes de Harry, así como de Carlos, sostuvieron reuniones el pasado mes de julio que prometían coordinar y hacer posible la reunión.
“Harry ofrece la reconciliación, pero a un precio. Y ese precio incluye que toda la familia real se incline ante Meghan”, comentó una fuente de Shuter.
El príncipe Harry ha hecho una jugada que pone a temblar una vez más la situación entre él y la Corona británica. Lo que se esperaba fuera un encuentro que culminara en reconciliación ha pasado a convertirse en otra situación de tensión al solicitar el cumplimiento de estos requisitos. Por supuesto que los medios internacionales y los fanáticos de la realeza estarán contando las horas de este fin de semana para descubrir en qué termina este incierto retorno de Harry a suelo británico.