El retinol se ha convertido en uno de los ingredientes más buscados en el cuidado de la piel, no es casualidad. Este derivado de la vitamina A promete reducir arrugas, eliminar manchas, además de mejorar la textura de la piel. Sin embargo, también es conocido por causar irritación si no se usa correctamente. Por eso, aquí te explico para qué sirve y cómo integrarlo de forma segura en tu rutina diaria, especialmente en 2025, donde las pieles sensibles son prioridad.
Cómo usar retinol sin dañar tu piel: paso a paso recomendado por dermatólogos
1. Solo por la noche
“El retinol es fotosensible y puede hacer que la piel sea más propensa al daño solar, por eso se aplica solo en la noche”, advierte la Dra. Mamina Turegano, dermatóloga y profesora en Nueva Orleans.
2. Comienza con baja frecuencia
Las primeras semanas, úsalo solo 2 veces por semana, y si no hay irritación, aumenta a noches alternas o uso diario.
3. Aplica una cantidad mínima
Del tamaño de un chícharo es suficiente para todo el rostro, evitando los ojos y las comisuras de la nariz y boca.
4. Siempre hidrata después
“El retinol puede causar resequedad. Para evitarlo, usa una crema hidratante suave inmediatamente después”, recomienda la Dra. Bowe.
5. Nunca omitas el protector solar
Durante el día, aplica un protector solar de amplio espectro FPS 50. El retinol hace que la piel sea más sensible al sol.
¿Cuándo empezar a usar retinol en la rutina facial?
Aunque durante mucho tiempo se pensó que el retinol era un ingrediente exclusivo para pieles maduras, hoy los dermatólogos coinciden en que puede integrarse desde etapas más tempranas. Incluirlo en la rutina de cuidado facial desde los 25 años permite actuar de manera preventiva, ya que ayuda a mantener la elasticidad de la piel, minimizar poros o controlar brotes de acné leve. Eso sí, su uso debe ser progresivo y bajo supervisión dermatológica si existen condiciones específicas como rosácea o sensibilidad extrema.
¿Qué errores evitar al usar retinol?
Uno de los errores más comunes es usar retinol en exceso o combinarlo con otros activos irritantes como los ácidos exfoliantes sin indicación médica. Esto puede comprometer la barrera cutánea y provocar reacciones adversas como descamación severa, ardor o brotes. Otro fallo frecuente es no usar protector solar diariamente mientras usas este producto, lo que puede generar más daño que beneficio.
Incorporar retinol a la rutina de skincare puede ser uno de los pasos más efectivos para transformar visiblemente la piel, siempre y cuando se haga con conocimiento, paciencia y constancia.