El curioso proceso al azar que siguió Meg Ryan para adoptar a su hija

La maternidad ejercida por la Meg Ryan ha sido muy especial, incluso desde los primeros momentos en los que comenzó a ejercerla particularmente con su hija adoptada

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Meg Ryan y su hija Daisy

Especial

La vida privada de la actriz hollywoodense Meg Ryan ha dado de que hablar en diversas ocasiones. Por ejemplo, en los años 90, cuando la relación que mantenía con Dennis Quaid se volvió uno de los ideales románticos de la época.

Igualmente, su divorcio y la crianza del hijo que tuvo con el protagonista de Juego de Gemelas (1998), fueron aspectos de la vida de Meg que cobraron relevancia en los medios.

Sin embargo, el hito de la semblanza personal de Ryan podría ser la obtención de la custodia de su hija Daisy, a quien adoptó a partir de un particular método.

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Dean/MO/Bauer-Griffin

¿Cómo fue el proceso de adopción de Daisy, la hija de Meg Ryan?

Después del escándalo vivido por las especulaciones respecto a su separación con Dennis y de haber terminado de criar a su hijo en común, Jack Quaid, Meg Ryan decidió que nuevamente deseaba convertirse en madre, por lo que no le importó emprender su camino para ser una madre soltera.

Corría el año 2006, cuando Meg emprendió un viaje a China, donde el método de elección de padres adoptivos para niños sin hogar es completamente aleatorio.

A pesar de que en los planes de la actriz estaba obtener la custodia de un niño, el destino hizo que, sorpresivamente, un día llegara a su celular la fotografía de Daisy, quien estaba lista para serle asignada.

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Meg Ryan ha compartido lo orgullosa que se siente de su ahora hija adolescente por medio de Instagram

Instagram @megryan

Meg se enamoró instantáneamente de la esencia de la niña y aceptó, convirtiéndose en madre por segunda ocasión, a los 45 años de edad.

Tal como cualquier mujer lo hubiera sentido, Meg Ryan revela que experimentó muchos nervios al concluir el proceso de adopción, pues no sabría que personalidad tendría su hija no biológica, ni el recibimiento que le daría su hijo Jack. Sin embargo, descubrió en la infante china toda una serie de cualidades, entre las que enlista la inteligencia, y su promogénito recibió con los brazos abiertos al nuevo miembro de la familia.

Apasionada de toda intersección entre el cine, la moda, el arte, la cultura pop y cualquier ficción creada por mujeres. Me gusta encontrar nuevas formas de contar lo que ya se ha dicho.
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