John Galliano ha tomado la decisión estratégica de abandonar Maison Margiela tras una década al frente de la dirección creativa. El diseñador ha comunicado que no renovará su contrato, lo que implica un cambio importante en su carrera profesional. Esta decisión se hará efectiva en otoño de 2024, a pesar de los esfuerzos de Renzo Rosso por retenerlo.
El famoso y controversial diseñador, expresó su decisión a través de un comunicado publicado en sus propias redes sociales. Ahí John comenzó revelando: “Hoy es el día en que digo adiós a Maison Margiela”.
Posteriormente comenzó un mensaje que, actualmente, resulta misterioso: “Los rumores... Todo el mundo quiere saber y todo el mundo quiere soñar”, explica y continúa, “cuando llegue el momento, todo se revelará. Por ahora, quiero expresar mi inmensa gratitud. Continúo haciendo penitencia y nunca dejaré de soñar... Yo también necesito soñar”.
Los claroscuros de John Galliano
La figura de John Galliano se define por una dualidad fascinante: un talento excepcional para la moda, contrastado por comportamientos controvertidos que han marcado su carrera. Su vida es un claro ejemplo de cómo el éxito y la fama pueden coexistir con la controversia.
Nacido en Gibraltar y formado en Londres, Galliano ha construyó una sólida trayectoria en la industria de la moda. Tras graduarse de la Central Saint Martins, fundó su propia marca y rápidamente se posicionó como uno de los diseñadores más prometedores de su generación. Su nombramiento como director creativo de Dior en 1996 supuso un hito en su carrera, consolidándolo como una figura clave en la moda internacional. Durante este periodo, sus diseños innovadores, como el icónico Saddle Bag, revolucionaron la industria y le valieron numerosos reconocimientos.
Paralelamente a su éxito profesional, John enfrentó desafíos personales relacionados con el abuso de sustancias, los cuales culminaron en un incidente público en 2011 que manchó irremediablemente su reputación. Sus comentarios antisemitas, realizados en un café parisino, le costaron su puesto en Dior y lo alejaron de los focos durante varios años.
Para el diseñador, hoy, 11 de diciembre es un día especialmente significativo, celebra un logro personal: “Mi corazón rebosa de gratitud y mi alma sonríe. Tengo 14 años hoy, 14 años sobrio”.
Los seres humanos en su mejor momento son resilientes, creativos e inventivos cuando no tienen miedo de ser ellos mismos.
El legado de Maison Margiela
Desde su fundación en 1988, Maison Margiela ha revolucionado la moda con su visión vanguardista y su filosofía de la deconstrucción. Bajo la dirección creativa de Martin Margiela, la marca se destacó por desafiar las convenciones tradicionales, creando prendas que eran tanto obras de arte como objetos de deseo.
La filosofía de “nada se pierde, todo se transforma” ha sido un pilar fundamental en el legado de la casa (una visión en tendencia en estas fechas). A través de la experimentación con materiales reciclados y técnicas innovadoras, la marca ha demostrado que la moda puede ser sostenible y, al mismo tiempo, altamente creativa.
La llegada de John Galliano como director creativo de Maison en 2014 marcó un nuevo capítulo en la historia de la marca. Su visión dramática y teatral revitalizó la casa, infundiéndola de una energía fresca y contemporánea. Galliano logró fusionar su estilo distintivo con la esencia de Margiela, creando colecciones que desafían las convenciones.
Ahora, Galliano expresa su más profundo agradecimiento hacia Renzo: “El mayor y más preciado regalo que me dio fue la oportunidad de volver a encontrar mi voz creativa cuando me había quedado sin voz. Mis alas se curaron y entendí mejor el acto absorbente de la creatividad”, compartió el creativo.
En retrospectiva, John relata cómo ha cambiado desde que aceptó el reto de dirigir la casa de moda: “Diez años después, estoy eternamente agradecido por este espacio seguro para crear y construir una nueva familia que me apoya con valentía y dignidad. Aunque poco había cambiado en la industria entonces, mi perspectiva sobre ella ha cambiado radicalmente. Empiezo a ver cambios a mi alrededor: compasión y empatía”.
Lo que comienza con un “adiós” parece que será un hasta luego. “Admito de buena gana que soy exigente y difícil de llevar cuando me desafían, pero mira lo que hemos construido” comenta Galliano, .
