La marquesa que se convirtió en amante del rey y en una de las mujeres más poderosas de Francia en el siglo XVIII
El rey Luis XV conoció a la que después sería su amante más poderosa y querida, madame de Pompadour, en una fiesta de disfraces en 1745, en la que ella estaba vestida de granjera y él disfrazado de árbol. Aquel encuentro fue providencial, pues dos semanas más tarde, la Pompadour tenía un apartamento privado en el palacio de Versalles y el Rey no podía vivir sin ella.
Otro dato curioso es que Luis XV se sentía culpable por tener amantes, porque apreciaba las cualidades de su esposa, la reina Marie Leszczynska, pero Pompadour lo mantenía tan entretenido con conciertos, obras de teatro, juegos, etc., que él ?no tenía tiempo para pensar en otras cosas?.
Pompadour ?nacida sin nobleza alguna como Jeanne- Antoinette Poisson en 1721? siempre decía que era ?de la alta aristocracia? porque posiblemente era hija de uno de los ricos amantes de su madre.
Jeanne se casó con un noble rico en 1741 y tuvo hijos: un niño que murió siendo muy pequeño, y su hija Alexandrine.
Cuando se hizo amante del rey en 1745, Jeanne se separó legalmente de su esposo y entregó a la niña a una familia para que la cuidara. Poco después, Luis XV le dio el título de marquesa de Pompadour y varios palacios, y ella se convirtió en una de las mujeres más poderosas de Francia.
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