Durante años, la casa Real de Noruega proyectó una imagen cercana y responsable, sin embargo, luego del incidente del hijo mayor de la princesa Mtte-Marit, Marius Borg, ocurrido hace un año donde fue vinculado a acusaciones de agresión y por violación de una orden de restricción, la reputación de la familia real se puso en jaque.
A raíz de esto, la princesa Mette-Marit ha sido criticada por la forma en que se ha abordado el incidente, pues no ha ofrecido ninguna declaración ni se le ha visto acompañar a su hijo durante el proceso legal de sus acusaciones situación que se ha agravado luego de que se reportara de la salida vacacional de la familia real, pero a la que la princesa no asistió.
Un nuevo escándalo por parte de Marius Borg
Como cada verano, la familia real aprovecha las vacaciones de verano para realizar un viaje familiar, sin embargo, en la edición de este año la princesa Mette-Marit no asistió.
A pesar de toda la polémica que generó el hijo mayor de la princesa decidió emprender este viaje con el príncipe Haakon y su hermano Sverre Magnus, quienes eligieron Portugal como destino. La playa Ribeira d’llhas se destaca como uno de los destinos favoritos de la familia, pues permite realizar múltiples actividades como el surf o el bodyboard, de hecho, es considerada como una de las mejores playas en toda Europa.
Al destino arribaron los tres hombres en un vuelo desde Oslo hasta Lisboa y de acuerdo con informes de SE og HØR luego de descender del avión abordaron un auto privado que esperaba por ellos.
Por supuesto que la presencia de Marius ha creado controversia y descontento, pues el pueblo noruego menciona que el hijo mayor de la princesa Mette-Marit está haciendo uso de privilegios reales cuando él no forma parte de la realeza como tal.
Una ausencia evidente o una evasión
Por supuesto que la ausencia de la princesa en un evento familiar ha generado especulaciones y rumores sobre qué es lo que podría estar ocurriendo, pues hasta el momento no se ha dado explicación alguna o de manera oficial del porqué se tomó la decisión de no acompañar a su esposo y sus hijos.
Dentro de las especulaciones más sonadas en los medios noruegos se encuentra el estado de salud de la princesa. Recordemos que Mette-Marit ha enfrentado problemas de salud en los últimos años derivados de su padecimiento de fibrosis pulmonar crónica, sin embargo, hasta el momento son solo rumores, pues la última vez que la corona anunció un descanso de la agenda oficial de la princesa por motivos de salud fue en el mes de marzo.
Quien tampoco asistió a las vacaciones familiares fue la princesa Ingrid quien actualmente se encuentra en Australia estudiando Ciencias Sociales en St Andrew’s College.
Este episodio puede repercutir de forma negativa a la dañada imagen de la corona noruega, pues da la impresión de que dentro del entorno familiar está ocurriendo una crisis que amenaza con alterar la estabilidad de la que era una de las casas reales más cercanas con su pueblo. Por el momento la sociedad noruega continúa a la espera de una comunicación clara por parte de la princesa Mette-Marit.