Coloca una charola en el congelador durante una hora.
Con un scoop saca bolitas chicas de helado, empanízalas un poco con el panqué desmoronado; coloca las bolitas en una charola fría.
Congela durante dos horas.
Calienta el aceite; mezcla en un tazón la harina con el agua fría, toma las bolitas de helado con un palillo, pásalas por la masa de tempura y fríelas en aceite hasta que doren. Sirve de inmediato.