El famoso chef Canales, del restaurante Etxanobe en Bilbao, nos da unos trucos para preparar y conservar mejor los mariscos.
- Los mariscos deben consumirse siempre muy frescos.
- Las conchas o valvas de los moluscos frescos deben ofrecer resistencia al intentar abrirlas.
- Si algún molusco está abierto y al golpearlo no se cierra, hay que desecharlo.
- Si desprenden mal olor es síntoma de que no están en buenas condiciones.
- Los moluscos son frescos si se contraen bruscamente al añadirles unas gotas de limón.
- Los crustáceos (langostinos, camarones, quisquillas y cigalas) no deben presentar ennegrecida la parte de unión de la cabeza y el cuerpo. No se debe desprender la cabeza del cuerpo fácilmente y no deben oler a amoníaco.
- Los crustáceos (langosta, bogavante, centollos, buey y nécoras) deben cocerse preferentemente en agua de mar, o en su defecto, en agua con sal gruesa o sal de mar.
- Los crustáceos deben comerse preferiblemente en los meses que contengan la letra “R”.